EL DESAHAOGO - Relatos Eróticos

EL DESAHAOGO

... embestir, nosotros racionamos rápidamente  Juan Pablo se sentó en su lomo por lo que la obligo a conservar la posición mientras Checho y Teo le amarraban las manos al banco y a su vez resto amarramos sus piernas alas pesas. No pudo hacer nada Linda solo gritar y a suplicar por que la soltáramos que no le hiciéramos daño
Linda: Por favor Juan Pablo no me hagas esto. Suéltenme! AUXILIO!!
Juan Pablo: Sin lloriqueos Linda déjanos probar ese culote y todo será rápido como satisfactorio para todos
Checho: Quien te manda a ser culona!
Y con una palmada en la cola dejo claro el punto Checho, tanto que no me aguante las ganas de poner toda mi mano sobre la nalga de Linda la cual era sumamente descomunal y carnosa de inmediato me provoco una erección que  sobresalió a mi sudadera lo cual fue percibida por todos que hizo que mis compañeros  no solo comentaran sino me bajaran el pantalón:
El Negro: Que esa monstruosidad?
Federico: Es mi verga es que tengo Macrofalosomia
Teo: De verdad esa si es mucha verga de burro
El Negro:Y feliz usado esa herramienta Burro?
Federico:No he podido usarla, se asustan!
Popeye: En serio es virgen pobre hombre
Entonces Juan Pablo se acercó a mí me tomo del brazo y me llevo al frente de Linda y añadió;
Juan Pablo: Mira Linda qué opinas de esta banderilla? (refiriéndose a mi Verga erguida) 
Ella miro de reojo a Pepe “Mi vergon” pero no quiso sostener mi mirada, yo en cambio me quede mirando su rostro de muñequita asustada y su cabello recogido ...

... con un moño que por instante quise perder la cordura y restregarle a Pepe en la cara, pero me gano la timidez o la pena por ella, entonces mis pensamientos fueron interrumpidos por las palabras de Juan Pablo que me sorprendieron;
Juan Pablo:Burro es hora que estrene esa herramienta, te sedo los honores!
Federico: Que?
Checho: Órale! Burro comience usted para excitarnos!
Linda al escuchar esto se altero era su sentencia enloquecida comenzó a gritar y trataba de zafarse, mientras mi mano temblorosa recorrió la espalda de Linda mientras me ubicaba en su retaguardia,  para ese momento los nervios me hicieron comenzar a sudar a chorros estaba ansioso pero una parte de mí no quería lastimarla, sin embargo mis compañeros me animaron aúnmás; “No lo piense tanto clave su herramienta Burro” “Vamos entierre su banderilla” Y mientras vociferaban mire el rostro de Linda por el reflejo del espejo, el cual lucia muy contrariada forcejeaba desesperadamente por liberarse, lo cual me hizo dudar por instante pero al retornar mi mirada a sus prominentes caderas redondas me motivo para  bajarle su pantalón de licra negro a Linda y entre más  miraba, más me enfocaba en su cola que al descubierto observe unos glúteos blancos  generosos y un panty negro el cual trate de quitar suavemente pero no pude! Sin embargo entre todos prácticamente lo arrancamos de la humanidad de Linda. Checho se quedó con la mayor parte del panty oliéndolo como un trofeo mientras tanto yo estaba más que listo para meterle ...