Descubriendo el sexo con mi hermana - Relatos Eróticos

Descubriendo el sexo con mi hermana

... recuperarse y me tranquilizó diciéndo, no Ángel no me hiciste nada, al contrario, lo hiciste tan bien que lo que tuve se llama orgasmo y es muy rico. Yo creo que puse una cara de pendejo porqué comenzó a explicarme que cuando nos tocamos nuestros miembros llega un punto en que se alcanza el placer máximo.

Tú no te tocas el pito hermanito? me dijo Valeria. Claro que sí lo hágo le respondí rápido, pero a mi me sale algo blanco. Ahí tienes hermanito, lo mismo nos pasa a nosotras, es más, apuesto a que lo tienes parado o no? yo me puse rojo de la pena. No tienes porqué apenarte hermanito, sácate el pito y yo te ayudo a tocarte así como tú lo hiciste conmigo me dijo Valeria. Yo no sabía qué hacer, estaba como impactado, aunque estaba muy excitado y la idea de que ella me ayudara me puso más caliente pero no atinaba a decidir, por lo que ella tomó la iniciativa y me recostó en su cama, me bajó el pantalón a la altura de los talones y luego me bajó mi calzón. Yo tenía tan dura la verga que vi en la mirada de mi hermana un poco de sorpresa pero también de deseo. Sabes hermanito, es la primera vez que veo una verga, me dijo Valeria. De veras hermanita? le pregunté. Sí, sólo las había visto en revistas o en películas, pero nunca tuve una delante mio me contestó y a continuación me lo agarró con sus dos manos y lo empezó a sobar, de arriba a abajo, yo lancé un suspiro al sentir muy rico. Te gusta hermanito? me preguntó pícaramente Valeria. Si hermana, me gusta mucho, sigue por ...

... favor. Vale siguió masturbando mi verga, haciéndome ver estrellitas de placer. Tenía los ojos cerrados cuando de pronto sentí que iba a terminar y apenas pude decirle, Vale se me sale y por toda respuesta puso mi hermana su boca en la cabeza de mi verga justo en el momento en que mi eyaculación tenía lugar. Pude ver claramente como Vale no hacía ningún gesto de desagrado, al contrario, ví que se tragaba mi semen sin más. Fue mucho mejor que como me había imaginado el que me hicieran una mamada.

Te gustó hermanito? me preguntó Vale. Claro que sí, pero no tenías que tragarte mis mocos le dije. Mocos, así le dicen tú y tus amigos? me preguntó un poco molesta. Entonces cómo les digo? le respondí con otra pregunta. Bueno, me dijo Valeria mientras  pensaba por unos segundos, ya sé, le vamos a decir leche, pues eso es lo que parece, te gusta?. Yo me quedé igual unos segundos pensando y la respondí, sí, me gusta eso de llamarla leche. Esa noche, al recordar cómo mi hermana me había practicado el sexo oral me excité tanto que tuve que volverme a sacar la leche rememorando la experiencia, sobre todo al recordar cómo Valeria se tragó mi leche.

Al día siguiente y mientras volvíamos a casa del colegio, Valeria me dijo, Hoy vamos a seguir con las clases de sexo hermanito, estás listo? Qué si estaba listo? Claro que lo estaba y le respondí, sí hermanita sigamos con las clases. Tan pronto llegamos a casa, subímos a su habitación y me dijo, quítate los pantalones y el calzón. Yo rápido me ...