Más de mi tía...mi amante - Relatos Eróticos

Más de mi tía...mi amante

... que me gustas y que me siento... No se, querida, protegida por ti pero...

Como todo esto me lo decía abrazada a mi pero con la mirada para abajo le levanté el rostro con mis dos manos y le dije mirándola a los ojos

-Te amo Gaby, te amo y tú también me amas, ¿O no?

-Si, ahora se que te amo Bet, te amo
Entre beso y beso de reconciliación nos fuimos despojando de nuestras ropas me besaba el.cuello y yo le pellizcaba sus nalgas, bajo a chupar mis pezones, primero suave pero conforme se excitaba sus caricias fueron más salvajes, como a mí me gusta!

-Atiendeme Gabrielita, atiende a tu marido, chupame mi cosita
-Si amor, recueste
Y lo hice sobre un pequeño sillón que está en la sala, abrí mis piernas y empezó a lamer mi rajita de arriba a abajo, metía su lengua en mi culo y pasaba a mi clítoris provocándome un orgasmo que me hizo gritar.
Luego la recosté en el piso y me monté en su cara haciendo un 69, posición que en momentos nos costaba trabajo a ambas, a quien le tocaba estar arriba pues de alguna manera no nos acomodabamos a la espera de encontrar un pene que mamar, pero íbamos mejorando nuestra técnica, una vez pasado el momento sexual, estábamos abrazadas recostadas en el sillón cuando jugueteando con mis pelos públicos me dijo

-Oye amor, te quiero decir algo pero prométeme que no te vas a enojar, ya te dije que en verdad te amo y me gusta como me coges...

Me sorprendió su actitud y aunque a la defensiva le prometí que no me molestaría.
Amor, tú me ...

... encantas, como te dije y como te has dado cuenta, me fascina hacer el amor contigo,  pero no sé, yo casi estoy segura que también te puede pasar a ti...(silencio)

-¿Y? -Le dije
-Pues... Que me llega el momento en que igual necesito sentir o quisiera sentir algo dentro de mi, algo que igual me satisfaga por dentro.
-¿Un hombre? Le dije 
-Pues ...si, pero no lo digo porque quiera hombre, sino que te pregunto ¿Tu no sientes igual? ¿No sientes que te falta algo?

No respondí luego, cerré mis ojos y en cierta forma la entendía. No le había dicho nada pero de mi vida sexual con hombres no me podía quejar, lo había gozado mucho, incluso había pacientes que me adulaban, un doctor que me insistía en invitarme a salir, y en esa semana me tocó preparar a un adolescente de 19 para una operación del apéndice, me tocó afeitar su pubis y aunque se veía tímido y a pesar su dolor que tenía se excito cuando lo preparaba, incluso mis cosita se había mojado y yo como no queriendo le había jugado su verga.

-No se a que quieras llegar, pero deja ver si estoy entendiendo, ¿Quieres que invitemos a un hombre a coger con nosotras?, ¿Te gustaría tener tu hombre y yo igual tuviera uno?

-No así no, pero Bet yo me conozco y sobre amo pero igual me siguen atrayendo los hombres ¿o a ti no? Responde, solo responde y no te voy a decir nada más

-Si Gaby me siguen gustando pero no te voy a cambiar por nadie, ni otra mujer ni ningún hombre
 
-No te digo que me cambies o que yo te cambie pero solo ...