1. Descubriendo el secreto de mi madre


    Fecha: 28/04/2020, Categorías: Zoofilia Tus Relatos Autor: brandonelerotic, Fuente: Relatos-Eroticos-Club-X

    ... bebe ya abotona me y lléname con tu leche aprovechame toda-
    
    y poco a poco conforme pancho se la cogía, la bola se introdujo mas y mas hasta quedar todo por dentro.
    
    Marcos y yo no parábamos de masturbarnos y cuando creímos que ya había terminado de la vagina de mama comenzaron a emanar hilos de semen, esa descarga era algo brutal, la concha de mi madre solo se dilataba tanto como podía y pocos minutos después pancho termino, su gruesa bola se habia desinflamado y de separo de mi mama.
    
    al bajarse mi madre solo podia gemir y respirar muy profundo, mientras pancho lamia y relamia la vagina de mi mama. Marcos y yo terminas tan excitados que nos corrimos sin reparo alguno.
    
    yo rapido le hice de señas a Marcos para irnos y dejar a solas a mi mama, al retornar a casa marcos dijo.
    
    -puta tu madre es una cerda y me importa si coge con un perro pero que rico fue esto-
    
    -la verdad siii ver a mi madre en plena monta me puso muy duro, menuda puta que salio-
    
    en ese momento le dije a marcos que fuera a mi cuarto y asi fue, mientras yo fui al cuarto de mi madre y tome 2 tangas de la cesta de ropa sucia, al  llegar a mi cuarto le dije a Marcos.
    
    -oye nos toca una segunda ronda, que opinas?-
    
    ambos tomamos una tanga y nos comenzamos a masturbar, sabíamos que mi madre se tardaría en recuperar y eso nos dio tiempo para una segunda eyaculacion.
    
    marcos se amarro el tanga de mi madre al rededor del pene, y solo decia.
    
    -joder que puta estas mi amor, que vagina tu hijo es un cerdo y un miron, eres toda una puta bebe-
    
    eso no hacia mas que calentarme, estábamos al borde el climax y rapidamente eyaculamos sobre esas finas y delicadas tangas fue un orgasmo digno de recordar.
    
    minutos mas tarde, mi madre se dejo ver, sorprendida de vernos en casa tan temprano, ella tan sexy como siempre vestia un short y blusa, muy de verano y nos ofreció una merienda para saciar el hambre mas no sabia lo satisfechos que nos encontrábamos
«123»