Relato 1 - Danila Crossintima - Relatos Eróticos

Relato 1 - Danila Crossintima

... ponga en riesgo mi salud. Él, entendiendo esto, me levanto de la barbilla para besarme. Yo bajé de la cama sin soltar su pene, me arrodille y volví a meterlo en mi boca y a jugar un poco. Quería que me viera en esa posición.
    Ahora sí, ya estábamos a full. Me levante con su ayuda y me llevo para que quede frente a él, encima suyo como para cabalgarlo frente a frente. Empezó por tomarme de la  cintura y luego a magrearme la cola, me encanta que me me hagan eso. 

Me encanta como te queda este jean -  me dijo, y comenzó a desabrocharlo. 

Yo lo abroche de nuevo y me di vuelta para que disfrutara mi cola… comenzó a tocarla, manosearla y besarla. Me tomaba de las piernas mientras besaba mi espalda y bajaba para mi cola. Lentamente desabroché el jean y comencé a bajarlo de forma muy lenta y  sensual. Esto lo volvió loco, empezó a chuparme la base de la espalda, lo cachetes, los bordes de mi culote, a meter despacio los dedos por debajo de mi ropita interior, a agarrar mis glúteos con sus manos y a recorrer el dibujo de mi cola por encima del culote. Ahí encontró que había algo en mi cola que la adornaba. Entonces empezó a jugar él, a mover el plug, apretarlo, girarlo, sacarlo un poquito y meterlo nuevamente, todo por sobre mi ropita interior. Moría de excitación, sacudía mi cola y disfrutaba como loca. Lo deje hacer a placer, para que avanzara a su ritmo, aunque moría de ganas de prenderme de su pija y rogarle que me cogiera como me merezco, como la puta que quiero ...

... ser.

Cuando saco el culote y vio el plug se volvió loco, empezó a chuparme, y tocarme aún con más deseo e intensidad. Lo llenaba de saliva, lo tironeaba y lo metía hasta el fondo.  Ya no podía más de la calentura, me derretía de placer y deseo. Me pidió que me pusiera en cuatro en la cama, cosa que hice inmediatamente. Saco el plug y empezó a chuparme la cola de una forma increíble, yo tenía ya una calentura tremenda y me retorcía de mil maneras gimiendo suavemente como respuesta a las sensaciones que producía mi ano. Cuando terminó de chuparme empezó a jugar con sus dedos llenos de mucho lubricante, era el momento tan esperado.
Volví a su pene, ahora estaba mas duro que antes, bastante más duro que morcillon, le puse un forro con la boca y comencé a chuparlo bien a fondo, succionarlo, tragarlo todo. Cuando se puso bien duro lo giré para que se recostara. Me senté sobre él. Aplique con mi mano un poco de lubricante en su pija, y luego más aun sobre mi cola. Odio el dolor y me encanta sentir como una pija entra dura y suave resbalando por mi cola. Comencé a meterlo en mi lentamente, era grande y para evitar el dolor debía ser diestra. Era necesario que tuviera yo el control al inicio para poder disfrutarlo enteramente y bien hasta el fondo. Luego de tenerlo bien adentro y de los segundos necesarios para acostumbrar mi ano a abrazar el hermoso falo de mi macho, podíamos comenzar con la faena. 
Me entregue a su abrazo, a su ritmo y a que la fuera metiendo cada vez más, sacándolo, ...