1. Arrepentidos los quiere Dios. (Capítulo 55)


    Fecha: 19/07/2021, Categorías: Dominación / BDSM Autor: Febarsal, Fuente: CuentoRelatos

    Capítulo 55
    
    El reencuentro con Raúl derribó todas las barrearas que le puse a mis sentimientos. Me lo advirtió mi amigo José Antonio.
    
    Manolita: para ser un buen político, se requiere tener un gran concepto de la justicia. Y para tener un buen concepto de la justicia, es imprescindible que los sentimientos no influyan en las decisiones.
    
    El que Raúl me permitiera llevarme a sus hijos a España, como ya he dicho antes, era señal evidente de que volvería a por ellos. ¿Pero para quedarse a vivir? ¡Chi lo sa!
    
    No tenía ni idea de los sentimientos que le podrían quedar con respecto a mí; cuando estuviera en España lo sabría.
    
    Me quedé en la Embajada arreglando los papeles de los chicos. El Embajador no me puso ninguna objeción. (El País no estaba para ponerlas)
    
    Me quedé con los pequeños Raúl y Héctor, que jugaban por las dependencias de la Embajada, ajenos a toda tragedia.
    
    Di recado a Raúl, para que informara a su hermana Marga de lo hablado, y que les esperaba a ambos para comer.
    
    Comimos casi en silencio, cada uno con sus recuerdos, las emociones unidas a la tragedia confinaba las ideas. Rompí el hielo.
    
    --Ni que deciros tengo a los dos, que, en Los Alcores, preciosa localidad donde nací y he fijado mi residencia, además de ser la alcaldesa, poseo un gran complejo turístico que os brinda la oportunidad de reiniciar una nueva vida en España.
    
    Se prevé uno de los mayores crecimientos de la Comunidad Europea, y para dos profesionales como vosotros, está lleno ...
    ... de expectativas.
    
    --¿Qué te parece? dijo Raúl dirigiéndose a Margarita. Y te vas con Manolita y los niños a España.
    
    --Es una idea excelente, sobre todo por los niños. Dijo Marga.
    
    --Por mi encantada, sitio tengo para todos. ¿Y tú Raúl que vas a hacer?
    
    --Colaborar en la reconstrucción de mi País, después recoger a los niños...
    
    --¿Y después? Pregunté con cierto retintín.
    
    --No lo sé Manolita, no lo sé. Comprende mi situación.
    
    --Disculpa mi pregunta Raúl, he sido una desconsiderada.
    
    --No te preocupes, mujer. Sé de sobra tu generosidad, al menos con la familia del Pozo.
    
    Ahora fui yo la mosqueada, pero callé. Mejor dejar las cosas así. Añadí.
    
    --Bueno, es Marga la que debe decidir, no yo. Le dije tomando su mano y con una sonrisa que le pedía dijera que sí.
    
    --Esta noche te lo confirmo Manolita, pero no creo, mi País me necesita más que nunca. Llévate a los niños, que ellos estén a salvo de nuevas tragedias. Si es que Raúl quiere. ¡Claro!
    
    --Ya le he dicho que sí, hermanita, sufriré sin verles, pero al menos sé que Manolita va a ser como una segunda madre para ellos. Pero más sufriría aquí, viendo como carecen de todo.
    
    Me ha comunicado el señor Ministro de Asuntos Exteriores con el que he viajado en su avión oficial, que mañana al medio día partimos para Madrid. Por lo tanto debemos de acelerar los trámites.
    
    --Yo os dejo, dijo Raúl, debo continuar con la labor de rescate en la parte oriental de La Isla, una de las más afectadas.
    
    Abrazó a sus ...
«123»