1. Mi debilidad por las maduras


    Fecha: 05/05/2021, Categorías: Sexo con Maduras Autor: Hakan, Fuente: CuentoRelatos

    ... que Ud. estaba con la idea de que me la coja ¿verdad?
    
    —Mira mi hijo, ya me estaba animando, pero la verdad, con eso tan grande no lo dudo, a mí no me va a coger.
    
    —Pero por lo menos dele un besito.
    
    —No sea cochino, eso no es para besar.
    
    —Si señora Silvia, lo suyo también es para besar, déjeme que se la bese un ratito.
    
    —Se ha vuelto loco mi hijo a mí no me la besó nadie y nadie me la besará.
    
    —Ande señora Silvia, solo un ratito le voy a chupar su concha.
    
    Las palabras "chupar" y "concha" la excitaron más a la señora Silvia, que ya estaba con las piernas abiertas y con las tetas al aire.
    
    —Mmmmmm pero mi hijo, eso está mal como me lo va a chupar, eso suena muy sucio.
    
    La llevé a la sala, donde hay un sillón con un gran respaldar y la senté allí, entonces me arrodillé frente a ella la cogí por las pantorrillas y la jalé hacia mí, quedando ella sentada en el filo del mueble, inmediatamente le levanté las piernas por lo que su cuerpo cayó hacia el respaldar del mueble, metí mis manos, acariciando sus muslos hasta llegar a su trusa, la cual retiré sin pausa y sin prisa, sosteniendo en lo alto sus piernas las abrí y me acerqué poco a poco a su conchita.
    
    —No mi hijo no lo haga, no me chupe la concha. No me la chuuuuu aaaaaay, aaaaaay mi bebeeee, que coooosas ricaaaas sabes hacerle tu a esta señoraaaa aaaay.
    
    Yo seguía chupando su concha, metía toda mi boca dentro de su concha, le metía la lengua hacia que mi lengua se deslice dentro de su concha ella me ...
    ... jalaba el cabello y abría cada vez más las piernas, estaba fuera de todo control, completamente entregada.
    
    —Mi hijoooo me corro me corro aaaaaahhhhhh!!! aaaaaaahhhhh!!!
    
    Ella quedó rendida, terminó derramando hartos juguitos desde dentro de su concha, que rico que la señora Silvia se haya corrido en mi boca, yo la dejé tranquila que descanse por un minuto, después empecé nuevamente a chuparle la concha, ella al principio me decía que parara pero luego me dijo que estaba bien.
    
    —Mi hijo, Ud. lo que quiere es vaciarse ¿verdad?
    
    —Bueno, la verdad me ha encantado que Ud. se corriese pero está claro que yo también quiero correrme, ¿Ud. quiere que yo me vacíe señora?
    
    —Claro que quiero, quiero que vacíes, pero no quiero que me cojas porque tu pene es demasiado grande y me vas a hacer daño.
    
    —Vamos a su cama señora Silvia, allí con paciencia me podrá hacer terminar.
    
    —Está bien, vamos a mi cuarto pero nada de trampas, a mí no me vas a coger con esa cosa tan grande que tienes allí, máximo le daré besitos.
    
    —Está bien, vamos a ver señora.
    
    Entramos al cuarto de la señora Silvia, cerramos la puerta y como dos salvajes nos comimos a besos, no podíamos con nuestro deseo, ella ya estaba súper caliente y yo ni que decir después de todo lo que había vivido esa noche.
    
    Me desvestí hasta quedar completamente desnudo, la tomé a ella, y le saqué una a una todas las prendas que tenía, ya estaba la señora Silvia completamente desnuda, no lo podía creer, nunca me imaginé que ...