1. Mi hermanastro y yo (Séptima parte)


    Fecha: 04/05/2021, Categorías: Infidelidad Autor: Misaki-chan, Fuente: CuentoRelatos

    ... empapado con mis jugos, ya pronto la cama tendría un enorme charco por lo mojada que estaba, sus manos hábiles no tardaron en comenzar a acariciar mis senos, mientras una mano iba amasando, la otra daba pequeños pellizcos que me hacían retorcer de placer. Sentí que era suficiente, así que bajé poco a poco hasta su gran pene y metiéndolo a la boca que estaba muy húmeda también producto del beso.
    
    —Aaaah... tu pene siempre está tan delicioso, hermanito —dije, mientras le miraba a los ojos— aún me encanta este líquido preseminal que sabe taaan bien, también amo la sensación de lamer el tronco de tu pene y sentir tus deliciosas y brotadas venas —chupaba cada centímetro de su tronco ya que sabía que eso era su punto sensible— mmmnh... realmente se siente tan bien cuando lo recorro con los labios, sintiendo tu duro pene entrando por mi boca —dicho esto, comencé a chuparle más fuerte sintiendo que ya estaba a punto de correrse y dejé que un gran chorro de espeso semen disparara directo a mi garganta.
    
    —¡Esto fue lo mejor que he sentido en toda mi vida! —exclamó, estaba claro de que Sebas estaba confundido, pero no preguntó ni comentó nada cuando me vio que aún estaba arrodillada en la cama con mis brazos apoyando como una especie de posición en cuatro, con mis ojos aun viéndolo y con la boca semi-abierta.
    
    —Y eso que aún no termina... —me acerqué un poco más a donde él estaba— tendré la boca relajada y luego tú me lo meterás todo, hermanito —dicho esto, noté cómo su pene iba ...
    ... recuperando forma y volvía a ser tan duro como la roca, su rostro se volvió oscuro y su respiración se aceleraba. Sí, así es. Ahora solté a la bestia que tanto quería contener para "no lastimarme". Sentí cómo me iba tomando la cabeza con sus dos manos dirigiendo poco a poco mi boca a su pene cuando de repente me penetró salvajemente la boca causando que me diera una arcada, pero lo aguanté sintiendo cómo algunas lágrimas salían de mis ojos.
    
    —¿Cómo se siente, hermanita? Lo tienes todo adentro —eso era verdad, nunca había estado completamente dentro de mi boca— y ahora lo sacaré lentamente y vuelvo a penetrarte completamente hasta el fondo —sus movimientos eran bruscos, pero me gustaba ya que sentía cómo poco a poco mi vagina comenzaba a llegar a su orgasmo— ¿Te gusta esto, verdad? Puedo ver que ya has llegado a correrte —definitivamente así era, sentía cada estocada que me daba a mi garganta, mi lengua recorría internamente todo su pene cada vez que me iba penetrando y cada vez era más fuerte hasta que se salió de mi boca— esto aún no ha acabado, hermanita —dijo con un gruñido. Para este punto mi vagina ya era una catarata chorreando de mis jugos y con fuertes cosquilleos que me decían que lo necesitaba dentro de ella, aún estaba en posición de cuatro, pero esta vez mi cabeza estaba apoyado en la cama mojada por mi saliva y sus fluidos.
    
    —Mmmmh... ya no puedo aguantarlo más... aaah... aaah... aaah, ahora mi vagina está loca por tenerte dentro... —y con una sonrisa en el ...