Gracias a mi hija fui infiel a mi esposo
Fecha: 25/11/2020,
Categorías:
Infidelidad
Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos
... hablan y no te
quedas sola. Dicho lo cual salió dando un portazo. No pude dejar de pensar
para mis adentros
Claro te vas a sacar la calentura echándote un polvo con
tu novio.
De todas maneras viendo que Carlos acepto la invitación pensé
que seria un buen momento tener una charla con el sobre el asunto de mi hija.
Cenamos tranquilamente, bebimos vino, charlamos y cuando
prepare café Carlos se retiro de nuevo al estar y se sentó en el sofá. Yo llegue
con las tazas y la bandeja y cuando entré en la sala el recuerdo de lo de la
tarde me golpeó como si hubiera sido una bofetada, me recompuse como pude y me
senté en el sofá. Luego de tomar el café, tome coraje y le dije a Carlos
directamente:
Carlos, quiero que sepas que hoy vi lo que hacías tú y mi
hija en este mismo sofá y que trate de evitar algo que termine arruinando
nuestra relación de tantos años de amistad.
Carlos se puso rojo como un tomate, me miro y dijo:
Lo siento, de veras, lo siento. No era mi intención que
pasara nada sabes. Empezamos a hablar y charla va charla viene nos
encontramos hablando de sexo y ella me dijo que le gustaban las pollas
grandes y que había oído que la mía era grande. Así empezamos a jugar y a
tocarnos y bueno tu viste lo que pasó.
Si lo vi y dejare pasar por alto este incidente no
diciéndole nada a Alfredo pero tu tienes que alejarte de Carla.
Claro, dijo Carlos, te repito que no era mi intención.
A continuación cambió ...
... la expresión de su rostro de una forma
que no me gustó para nada y me dijo
Si viste todo, ya sabes como me ha dejado tu hija y tu
importunada entrada.
Dicho lo cual se me tiro encima y empezó a tocarme las tetas
y el cuerpo a la vez que intentaba besarme. Yo le empuje con las dos manos,
alcancé a levantarme y le dije con una furia que ni yo misma conocía:
Vete de esta casa. Vete y no vuelvas más. Que te has
creído, te tratamos como amigo desde hace años, has visto nacer y crecer a
Carla y hoy casi te la tiras y no conforme con ello pretendes tirarte a la
esposa de tu mejor amigo.
Pero Carlos, lejos de arrepentirse se me tiro encima de
nuevo. Con sus manos poderosas me agarró los brazos tirándomelos hacia atrás y
empezó a besarme por toda la cara. Yo corría mi cara para que no me tocara, pero
él insistía. Luego usó una sola de sus manos para sujetar mis brazos y con la
mano libre empezó a tocar todo mi cuerpo, Me magreaba las tetas, el culo, la
concha. Metiendo las manos por debajo de mi vestido introdujo dos dedos a través
de mi bombacha y me los enterró en la vagina. Yo seguía esforzándome por
liberarme pero no podía hacer nada., Era mucho mas fuerte que yo.
Entonces, me tiro al sofá, siempre con mis manos atrapadas,
me abrió las piernas y de un tirón me saco los calzones. En ese instante hundió
su lengua en mi vagina, chupando y mordiéndola, yo me sacudía y trataba de
recoger las piernas para no facilitarle la ...