1. EL OSO DEL DOCTOR


    Fecha: 08/08/2020, Categorías: Gays Autor: Javier_Madrazo, Fuente: SexoSinTabues

    ... Mientras su lengua daba movimientos circulares sobre mi pezón, el otro era estimulado por la yema de sus dedos pulgar e índice. Lo acariciaba y luego lo pellizcaba suavemente, y el otro era mordido con su boca. A este punto mi nivel de excitación era tanto que solo gemía y gemía como un loco. Empezó a bajar un poco más, besaba lentamente y avanzaba de mi pecho a mi pelvis. Cuando llegó a mi verga se detuvo un momento, y acto seguido desgarro mi bóxer. Y de inmediato mi verga de 15 cms quedó liberada. La metió a su boca y comenzó a mamarla como nunca nadie lo había hecho. Era un placer indescriptible, jugaba con su lengua, usaba sus labios y sus manos, en una combinación que tenían como resultado una explosión de placer en mi. Yo no podía hacer nada que retorcerme y apretar fuertemente su cabello. Después de estar un rato con mi verga me volteó bruscamente, me reclinó contra mi escritorio, levanto mi bata blanca. Yo intenté quitármela para darle más comodidad pero no me dejó. Me dijo que lo excitaba mucho verme con la bata puesta. Metió su cabeza bajo mi pata, me abrió las nalgas con ambas manos y comenzó a darme un beso negro que me llevó a la gloria. Usaba su lengua, la movía en círculos, lamia las paredes de mis nalgas y de repente daba pequeñas mordidas. Entre ratos me daba nalgadas, y escupía mi ano para luego usar la saliva como lubricante para intentar meter su lengua dentro de mí. Yo ya no podía mas y le grité: ¡Ya métemela cabrón! -¿Ya quieres que te la meta doc? ...
    ... -Si cabrón, ya me tienes bien caliente, ya no aguanto. Méteme la verga de una vez. -Eso es lo que quería escuchar doc. Quería escucharte pidiendo mi verga. Pues si la quieres ahí te va. Roberto levanto mi bata y me metió su verga casi de un solo golpe, pero por increíble que parezca no me dolió nada. Estaba demasiado caliente y mi cuerpo solo necesitaba tener la verga de Roberto adentro. Empezó un mete y saca delicioso, yo estaba de pie, con mi pecho recostado sobre mi escritorio. Roberto me tenia tomado por la cintura, y metía y sacaba su verga a un ritmo constante. Yo no dejaba de gemir. De repente, sin esperarlo, Roberto me jaló el cabello y me levanto de la posición en la que estaba hasta ponerme de pie. El inclinaba sus piernas para poder cogerme bien. Me tomó de la mano y me llevó a la cama de exploración. Colocó cada una de mis piernas en sus hombros y comenzó a cogerme nuevamente. Era todo un espectáculo ver como ese macho me estaba rompiendo el culo. Ver su pecho peludo, sus brazos largos y gruesos, su barba, pero lo mejor la cara de placer que ponía al meterme la verga. Entonces yo empecé a decirle: -Cabrón, que rico me coges. Méteme toda la verga. Rompeme el culo papi. -Te gusta tu regalo mi doc. Porque a mí me está gustando un chingo como aprieta este culito. -Me encanta cabrón. Me encanta mi regalo y quiero tenerlo cada vez que yo quiera, porque es mío. -Si mi doc. Es tuyo, y a partir de ahora está a tu disposición. Roberto me metió una cachetada, y eso lejos de ...