1. ¿Parcial o sexo?


    Fecha: 18/05/2020, Categorías: Gays Autor: Profesor, Fuente: CuentoRelatos

    ... abrir un poco sus piernas, no tanto para que sus compañeros no la notaran. Yo tocaba mi pantalón y sabía que debajo de él, mi pene palpitaba de la vista tan deliciosa que tenía en ese momento: pues no se había puesto ropa interior y sus ojos brillaban de lujuria. Todos los demás 15 estaban concentrados en sus evaluaciones, con sus cabezas inclinadas a las hojas como pescando en el mar. Sólo ella y yo nos mirábamos frente a frente.
    
    Bajé mi vista y pude notar que mi pantalón se había humedecido, producto de la estimulación que le estaba dando a mi miembro. Tenía miedo que alguien necesitara de mi ayuda y tuviera que pararme, pues notarían la prueba de mi excitación (o pensarían que ya era un viejo incontinente). Afortunadamente, durante todo el parcial nadie lo hizo. Ella seguía ahí, insinuándose y brindándome mucho placer con su minifaldita, sus piernas abiertas y su vulva retadora, como mirándome a los ojos.
    
    Descaradamente, y sin importarle que la vieran, procedió delicadamente a bajar su mano derecha y a tocarse. Yo seguía masajeando mi pene bajo el escritorio porque esto ya se había calentado bastante. Debo confesar que sentí temor de que otros estudiantes me vieran en eso.
    
    El tiempo para el parcial terminó, los estudiantes entregaron y poco a poco fueron saliendo. Ella terminó de última, ya se imaginarán por qué (no había contestado nada por andar de calientahuevos) y una vez estando solos se acerca con sus hojas y me dice:
    
    -- Mire profe acá está mi examen, ...
    ... pero le quiero decir algo
    
    -- ¿Qué será?
    
    -- Yo creo que ese parcial lo voy a perder, y si eso sucede, mi curso de inglés básico lo tendré que repetir.
    
    -- Pues debemos esperar a que lo califique para saber qué podemos hacer.
    
    -- Profe, yo sé que lo pierdo, mejor miremos ya qué vamos a hacer.
    
    -- Pues no sabría qué decirle señorita, necesito conocer primero su nota.
    
    En ese momento, vi que se le voltearon un poco los ojos hacia arriba, como de impaciencia, y con tono algo arrogante me dijo:
    
    -- ¡Ay profesor! No sea tan mojigato, yo sé qué es lo que usted quiere... ¿o me va a decir qué no le gustó lo que acabé de hacer?
    
    Ya descubierto, y embriagado de la emoción sexual derivada de su presencia, no me quedó de otra que aceptar lo mucho que me había gustado.
    
    -- Entonces, me dijo, ¿quiere que le pague ese parcial "en especie"?
    
    -- Pues... dije algo dubitativo, como dándomelas de digno, eso suena bien... sí me parece.
    
    Procedí a levantarme, y al ver la mancha de líquido pre seminal sobre mi pantalón, se rio coquetamente y con sorpresa me dijo:
    
    -- ¡Ve que sí la estaba pasando bien profe!
    
    Entonces la tomé de la cintura y le subí su minifalda, quedando su culo que era vecino de sus cabellos dorados, pues hasta allá llegaban, y su vulvita al aire. No la tenía totalmente depilada pero sí con un corte en forma de rectángulo, como el bigote de Adolph Hitler. Le amasé el culo mientras la besaba (lo cual ella sabía hacer muy bien) introduciéndole mi lengua en su ...