1. Viuda negra


    Fecha: 28/04/2020, Categorías: Sexo con Maduras Autor: dulces.placeres, Fuente: CuentoRelatos

    ... deuda pero el en un rápido movimiento llevó sus labios contra los otros labios, ella se separó sonrojada y sorprendida, pero él fue por mas, era el momento, fue por otro beso profundo, ella se rindió, ya no pudo evitarlo, el cazador tenía su presa.
    
    Subieron al coche, en el camino él le dijo de ir a un hotel alojamiento, pero recibió una negativa, estaba con su período, y nunca supo si fue verdad o solo un pretexto.
    
    Tomó una de las delicadas manos de Oriana y la llevó a su entrepierna, para que lo sobara y notara su dureza, y un poco más, un poco más…
    
    Ariel estacionó el coche en un lugar apartado, reclinó un poco el asiento, desabrochó la bragueta y sacó su pija dura, ella miraba en silencio, él la tomó por la nuca y la forzó con leve resistencia hacia abajo.
    
    Se sintió tan bien, solo veía los cabellos de Oriana y sentía unos eróticos chasquidos de la chupada que le daba, la empujaba bien abajo forzándola a comérsela toda, la imagen de su amigo Maxi se cruzaba por su mente, imaginaba que esos labios y esa lengua que se comían su verga pronto estarían besando la boca a su amigo, esto se le hacía demasiado excitante, una de las manos de Oriana lo masturbaba desde la base, acariciando sus huevos, no pasó mucho tiempo, como lava de volcán sintió su semen subir de repente y comenzó a acabar mientras ella permanecía concentrada en hacer su mejor trabajo.
    
    Observó con beneplácito como ella recuperaba su posición en el asiento, sus cachetes estaba inflamados y era ...
    ... notorio como pasaba el semen de lado a lado, Ariel puso una mano en el cuello de su amante y la mantuvo ahí presionando sin ser molesto, solo esperando, esperando el momento en que ella tragara para sentir el movimiento de la glotis es un mano, eso fue de veras excitante, percibir como su semen pasaba de su boca hacia su estómago.
    
    Ella no pudo contener una carcajada de pecado y por la comisura de sus grandes labios escapó un hilo blancuzco mezcla de semen y saliva.
    
    Ariel podría haberse dado por satisfecho en ese momento, ya había conseguido cruzar la raya, pero su machismo era más fuerte, quería cogerse a esa mujer a como diera lugar y nuca supo si realmente ella estaba indispuesta o solo había sido una excusa para evadirlo, esa espina había quedado clavada.
    
    El buscaría una segunda oportunidad, a espaldas de su amigo, a espaldas de su esposa, sintió que ya tenía en un puño a Oriana y fue por ella, insistiendo, una y otra vez, notando en cada intento como las tenues resistencias de la mujer parecían no ser nada convincentes.
    
    Él sabía que era cuestión de tiempo, era solo empujar y empujar sin cesar en el intento.
    
    Una mañana fue por todo, sabía que Maxi estaba trabajando y que ella estaba sola en su hogar, ya sabemos que Ariel era un estratega en todo esto.
    
    El tocó timbre, ella atendió al otro lado apenas abriendo la puerta, Ariel observó esos labios perfectos y recordó lo que había sucedido en el coche, ella no quería dejarlo pasar, pero el con un leve empujón logró ...
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