1. Incesto escatológico


    Fecha: 03/12/2019, Categorías: Hetero Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos

    Volví una noche de marcha y no había conseguido follar, llevaba un calentón tremendo. Tenía unas ganas de orinar tremendas y me fui directa al baño nada más entrar en casa y, zas!!! ahí estaba mi madre sentada y empujando. Logicamente me dijo que me fuera y esperase a que terminara, pero a mi rapidamente se me cruzó por la cabeza el incesto. Mi madre estaba buena, no era una supermujer pero tenía buen cuerpo, un poco gordeta nada más. Me acerqué a ella decidamente y me planté delante comenzando a desnudarme.
    
    Mamá: emma, qué te he dicho, pero qué haces, sal de aquí inmediatemente, vístete, pero qué te pasa!!
    
    Yo: me estoy meando mamá, y no aguanto, si no meo ahora mismo me lo hago encima.
    
    Desnuda ya me senté encima de sus piernas y comencé a orinar. Un potente chorro salió de mi vagina y le mojó la barriga y su almeja claro. Ella hacía gestos como para separse de mi, pero claro no podía. Además yo me había agarrado a ella abrazándola, nuestros pechos estaban aplastados unos contra otros.
    
    Yo:joder mamá, deja de moverte y sigue con lo tuyo, y déjame mear en paz.
    
    Mamá: pero estas loca niña?, me estas meando encima, y como voy a seguir con lo mio, estoy queriendo cagar, y no voy a hacerlo contigo aquí. Me has manchado toda con tu pis, salte de aquí ya.
    
    Mi contestación fue meterle un beso en la boca y sacar la lengua para intentar metersela. Empecé a moverme sobre ella para restregarle mi almeja y darme placer, ella no daba crédito. volví a intentar besarla, ...
    ... peor no abría la boca, así que bajé a sus tetas y comencé a chuparlas con fruición, sus pezones se pusieron duros inmediatamente, a pesar de sus protestas y de lo escandalizada que estaba. Sin dejar de chupárselas me llevé una mano a su boca y le pasé un dedo por los labios y debajo de ellos, por las encías, y volví a intentar besarla, esta vez abrió ligeramente la boca y sacó un poco la lengua, pero volvió a cortarse, así que yo dí un paso más. Bajé la mano a su chocho, peludo y mojado por mi pis y le metí un dedo. Abrió mucho los ojos y cuando me iba a pegar una voz le escupí dentro la boca. La pobre no era capaz de digerir la situación, pero vencí toda resistencia cuando me bajé de sus piernas y sin darle tiempo a reaccionar hundí mi cara en su vagina y metí la lengua moviéndola por todas partes. Sabía mucho a pis, no sólo por el mio, si no también porque ella había orinado, pero no importó lo más mínimo, se lo estuve comiendo hasta que tuve la certeza de que había ganado la batalla. Saqué la cabeza y esta vez sí que pude besarla, ella ya era presa el placer, y me tocaba por todas partes, mis pechos, la espalda, mi culo, el chocho..nos tumbamos en la alfombra del cuarto de baño y tras besarnos y manosearnos hicimos un 69. En esa posición, y mientras le comía de nuevo la concha le metí dos dedos en el culo que previamente me había chupado y ensalivado, y claro, me topé enseguida con la caca que no le había dejado cagar. Eso tampoco me importó, los metía y los sacaba sin ...
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