Las desventura de Elena (3)
Fecha: 05/08/2019,
Categorías:
Erotismo y Amor
Autor: señoreduardo, Fuente: CuentoRelatos
... nuevo miembro para conocerlo, Julia, no le he dicho mi nombre porque no importa. Todos me llaman señor y así debe llamarme. No he visto todavía a la presa que usted llevó al Club, pero me han informado que es un ejemplar de primera calidad y la felicito por eso, además de agradecérselo, claro, porque ya sabrá que toda carne que se lleva allí pasa a ser un manjar en común, ¿verdad?
-Sí, señor, estoy al tanto sobre eso y esa carne, como usted la llamó y que por cierto es de primerísima calidad, ya empezó a ser disfrutada por algunos miembros. -contestó Julia.
-Sí, sé lo ocurrido anoche, cómo fue capturada y todo lo que pasó después. Supongo que imaginará que como Sumo Regente estoy siempre informado respecto de los últimos acontecimientos. ¿Conoce usted el reglamento del Club, Julia?
-Sí, me lo han entregado.
-¿Alguna duda u objeción?
-No, me queda muy claro lo del uso en común de la presa y que como su dueña tengo el derecho de entregarla a los miembros que yo elija, como hice anoche, y también a decidir la oportunidad y la forma de los castigos.
-Sabe también que una vez que la presa ha sido entregada al Club su propietario ya no puede retirarla.
-Sí, por supuesto y no tengo inconveniente alguno con esa cláusula, ya que lo que menos me interesa es sacarla de allí.
-Bien, Julia, muy bien. ¿Tomó usted todas las precauciones para que nadie sepa dónde está esa hembra?
-Sí, no se preocupe. –dijo Julia y le contó al Sumo Regente la supuesta salida de ...
... Elena con ella y el posterior llamado de Federico.
-No habrá problemas con la intervención de la policía, ¿verdad?
El hombre sonrió con suficiencia y dijo:
-Absolutamente ninguno, Julia, quédese tranquila. Contamos con protección de muy altos círculos de poder. Se asombrará cuando conozca a algunos de nuestros miembros.
-Una pregunta, señor.
-Sí, adelante.
-En el pasillo hay otras celdas. ¿Están ocupadas?
-Habrá visto que las celdas son diez. De ellas, seis están ocupadas. Muy buena mercadería también.
-¿Cómo miembro del Club puedo conocer a esas hembras?
-Por supuesto, Julia. ¿Cuándo volverá por El Club?
-Mañana.
-Bueno, pídale a Wanda que le muestre esos ejemplares, aunque si le interesara alguna en particular deberá solicitar a su dueño la autorización para usarla. Wanda conoce a los propietarios de cada una de ellas, naturalmente.
-Entiendo, señor. –dijo Julia y pensó que le encantaría conocer al resto del ganado. Después recordó que Wanda le había dicho que el Sumo Regente le hablaría de algo, y quiso saber de qué se trataba.
-No se apresure, Julia, goce tranquila de su presa. Yo veré de hablarle de ese asunto cuando sea el momento indicado.
Julia se dio cuenta de que no tenía sentido insistir y reprimiendo a duras penas su curiosidad dijo:
-Bien, señor, como usted diga. ¿Puedo hacerle una última pregunta?
-Claro.
-¿Hay otras mujeres miembros o soy la única?
-No, querida, hay otras, aunque ninguna de ellas aportó nada ...