1. Mi amiga Lidia


    Fecha: 16/06/2019, Categorías: Masturbación Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos

    ... para la tarde siguiente. En mi casa, ni mis padres ni mis hermanos nos molestarían, unos trabajando y otros de vacaciones.
    
    A las 4 sonó el timbre. Abrí y al ver a Lidia sentí un hormigueo en el estómago, una sensación que me desconcertó, pues me recordó a lo que siento cuando me preparo para una sesión de masturbación. Venía ataviada con un vestido de esos que son como una camiseta muy larga, que hace de falda. Ésta resaltaba sus pechos sobremanera. Yo por mi parte llevaba una camiseta vieja, sin sujetador y un pantaloncito corto.
    
    Nos sentamos al ordenador y comencé a explicarle los fundamentos del programa, siguiendo por casos prácticos, profundizando un poco. A eso de las 6 de la tarde yo estaba agobiada por el calor y le pregunté si no le importaba que me fuera a dar una ducha rápida. No le importó, se quedó acabando un presupuesto ficticio.
    
    -Cuando lo acabes puedes mirar en el directorio C:internet. Lo tengo lleno de animaciones muy divertidas que me mandan por el mail- mientras decía esto recordé que aparte de las animaciones tenía cientos de videos porno y más de 10000 fotos de la misma temática. Pero por no delatarme preferí correr el riesgo. Quizá no se percatase.
    
    En el baño, abrí el grifo y volví a mi habitación para coger ropa limpia. Prefería vestirme en otra sala y no delante de mi nueva amiga.
    
    Al entrar vi que Lidia había descubierto la carpeta xxx y estaba abriendo videos con el reproductor. Minimizó éste y puso cara de ...
    ... circunstancias.
    
    -Perdona, pensaba que eran animaciones- dijo, con la cara roja como un tomate. -Ah, sí. Eso lo descarga mi hermano -mentí-. A ver si se lo grabo todo en cds y limpio mi disco duro -creo que mi voz me delató, pero no se me ocurrió otra excusa mejor-.
    
    Avergonzada y ligeramente aturdida cogí mi ropa y volví al baño. Me desvestí, pero antes de meterme en la ducha, me picó la curiosidad. ¿Seguiría Lidia ojeando mis videos? Cerré la puerta del baño por fuera y me acerqué sigilosamente hasta mi habitación. Asomé la cabeza asegurándome de que fuera imposible que ella me viera, tanto directamente como mediante el reflejo del monitor.
    
    Efectivamente, la pantalla mostraba a una rubia con 2 tipos. Ella de rodillas, comiéndoles la polla alternativamente, y en ocasiones con las 2 trancas dentro de su boca. Pero lo que me dejó de piedra fue el resto. Lidia estaba con los ojos como platos, y con el dedo corazón de ambas manos acariciaba sus pezones (marcadísimos) por encima de la tela del vestido. Cada poco los agarraba y estiraba con fuerza, hinchándolos más todavía. Realizaba lentos movimientos circulares, rodeando los pezones. Mojaba sus labios con la lengua y su respiración era cada vez más audible. No me agradaba en absoluto la idea de espiar a mi amiga, pero la situación me estaba poniendo a mil. Notaba los flujos resbalar por mi pierna abundantemente. Acaricié mi vagina y descubrí que estaba encharcada. No pude contenerme y llevé mi mano a la boca para saborear mis caldos.
    
    En ese ...