1. Una familia muy normal -XII


    Fecha: 28/03/2019, Categorías: Incesto Autor: sayago19, Fuente: SexoSinTabues

    ... el culo, así quiero sentirte dentro de mi” Escupí en mi mano y lubriqué mi pene, procedí poco a poco a introducirlo en el ano de mi madre; era una sensación diferente y muy placentera, la estreches de esa región apretaba mi pene como nunca lo había hecho la vagina de Inés. La tomé de la cadera y con movimientos rápidos la penetraba, lo cual me enardecía cada vez más y a ella la hacía murmurar con pasión, mientras se pellizcaba los pezones con una mano: “que rica la tienes, es más gruesa que la de tu papá; eres mi semental, así mi cachorrito, dame más duro y más rápido, quiero sentir como me llenas el culo con tu leche”. Me apoyé en su espalda para besarla en la nuca y decirle algunas guarradas al oído cuando de pronto, una mano me cubrió la boca y un pene intentaba sodomizarme. Al intentar resistirme me movía frenéticamente, haciendo que Inés disfrutara aún más, “Así mi bebé, cógete a la perrita de tu mamá; rómpele el culo por zorra. Así, más fuerte, Betito, así”. Un grito fue la señal de su orgasmo, al igual que las contracciones de su ano en mi verga. El invasor ya estaba dentro de mí, moviéndose con rapidez, una lágrima me escurría por la mejilla; parte por el dolor de la penetración y parte por el placer de estar dando y recibiendo sexo anal. Una barba pico mi hombro, unos dientes mordieron suavemente mi lóbulo izquierdo; una lengua jugaba dentro de mi oído y la voz de mi padre se escuchó en volumen bajo: “Bien Betito, ¿disfrutaste todas las veces que le diste verga a mi ...
    ... zorra?, por que ahora te toca pagar” Me jaló del cabello y me besó en la boca, la mano que me había evitado gritar pellizcaba mis pezones y los retorcía generando un grato dolor que me hacía seguir exitado y erecto. “Vieja” dijo Jorge (mi padre) “desenchúfate y límpiale la pistola como tu sabes hacerlo” Ella obediente se separó de mí, y comenzó a chuparme el pene erecto, deslizando su lengua por mis bolas, el tronco, chupando con lentitud el glande enrojecido. “Ahora a mí”, ordenó, extrayendo su miembro con un movimiento brusco e Inés como perrita en celo se lanzó a limpiarle su verga palpitante tal y como lo había hecho antes conmigo. Estaba sorprendido y no sabía que hacer, me acerqué a Jorge (como me lo indicó por señas) y tomándome del cabello me dirigió a su pello velludo “chúpame los pezones, como se lo hacías a esta zorrita, ándale cachorrito” Comenzé a seguir sus instrucciones, pero me sorprendió que mi madre ahora atendiera mi miembro, Jorge tomó mi mano y la llevó a su verga; comenzó a dirigirme para masturbarlo. Era la primera vez que tocaba un miembro distinto al mío, se sentía caliente y resbaloso por la saliva de mi madre; pero su textura agradaba a mi tacto; apreté un poco más mi mano e incremente la velocidad con la que lo recorría. Las venas de su tronco palpitaban en la palma de mi diestra, sin darme cuenta ya estaba jadeando de placer; Inés suspendió su sesión oral y apretó con fuerza la base de mi pene. “ya casi termina el cachorrito” dijo a mi padre. “Ya ...