1. Arena y primera vez con la hermana de un amigo


    Fecha: 13/02/2019, Categorías: Sexo con Maduras Autor: Webmonster6910, Fuente: CuentoRelatos

    ... erecto adentro del pantalón. Miré alrededor. La luna seguía iluminando desde el lado del agua lo que significaba que toda la gente nos podía ver perfectamente. Yaz no dejaba de jadear mirándome. Yo me acerqué a su oído y le dije:
    
    -Yaz, ¿aquí?
    
    Ella no contestó, sólo asintió jadeando y mirándome con los ojos entrecerrados. Con sus manos comenzó a hacer el gesto de sacarse el pantaloncillo así que la ayudé. La pantaleta se vino junto con el short pero obvio que a Yaz no le importo y apenas lo tuvo en los tobillos separó las piernas. Yo puse mi mano sobre su vulva y la besé. En eso escuché voces. Miré y desde el lado donde estaba nuestro carro venía alguien. Alerté a Yaz quien se incorporó y se levantó el short hasta los muslos porque no alcanzó más cuando nos dimos cuenta de que eran Rosario y Ray. Nos saludaron como si nada sin hacer caso al short caído de Yaz y se fueron hacía el agua.
    
    Nosotros muy apenados nos levantamos y nos fuimos al carro pero aún sin hablarlo nos subimos callados al asiento trasero. Yaz seguía visiblemente excitada. Apenas cerramos la puerta del carro se me vino encima y seguimos besándonos pero ella hábilmente se fue bajando nuevamente la ropa de la cintura para abajo. Hice lo propio pero mi pantalón sólo llegó a mis rodillas cuando me di cuenta de que Yaz miraba mi pene. Iba a acercarme a besarla otra vez cuando ella rápidamente se acomodó encima de mí y tomando mi pene con su mano comenzó a introducirlo en su vagina. Yo sentí que me ardía ...
    ... el prepucio abriéndose por detrás del glande que estaba atrapado en la estrechísima vagina de Yaz que casi de inmediato apoyó sus manos en mis hombros y mientras me daba besos en la boca de vez en cuando, empezó a mover su pelvis rítmicamente sobre mi pene que no dejaba de arderme aunque cada vez entraba más y más en su vagina. Como pude le solté el sostén y me di gusto tocando sus pechos. Traté de soltarle la blusa para sacársela y poder tenerla desnuda pero entre que ignoró mis intentos y ella se movía cada vez más fuerte, tuve que dejar de intentarlo cuando de pronto e inesperadamente ella se dejó caer sobre mí pujando y jadeando. Entonces se quedó quieta por un momento, pero apenas un momento. Se quitó de encima y se sentó a un lado. Sin dar tiempo a nada se puso su short y se recostó sobre mi hombro, ahora sí como afectuosa.
    
    En ese momento pareció caer en la cuenta y me preguntó si yo había terminado. Cuando le dije que no me dijo:
    
    -Pobrecito, déjame ayudarte- y comenzó a masturbarme.
    
    La parte chistosa del momento fue que ella se inclinó como si fuera a hacerme un oral pero me dijo:
    
    -¿Quieres echármelos en la cara?-
    
    Aquello fue automático y eyaculé como loco salpicándole toda su cara.
    
    Nos limpiamos y me vestí lo más rápido que pude porque sentíamos que Ray y Rosario ya volvían y nos queríamos bajar del coche. Yaz no quería que Ray se sintiera mal de confirmar que habíamos cogido casi enfrente de él. Ray nunca tocó el tema ni allá ni en los semestres que ...