1. Ayudando a Mamá (05).


    Fecha: 14/08/2017, Categorías: Incesto Autor: nokomi, Fuente: RelatosEróticos

    ... se estaba acostumbrando a usar lenguaje vulgar y explícito en momentos de calentura extrema. A mí me volaba la cabeza oírla hablar de esa forma. Llevaba largo rato disfrutando de su agujerito trasero hasta que sentí que llegaba al momento culminante.
    
    En cuanto terminé de inundar sus tripas con leche tibia y fresca me tendí a su lado. Ella se quedó en la misma posición un par de minutos intentando recuperar el aliento, jadeaba enormemente y sus ojos estaban desorbitados.
    
    - Qué carita tenés – le comenté – cualquiera diría que te rompieron el culo.
    
    La hice tentar, aún estaba agitada e intentaba controlar la risa, pero no lo consiguió. Verla feliz me alegraba el día. Aparté el cabello sudado de su cara y la besé.
    
    - Se me está saliendo toda – anunció.
    
    Me levanté con un fuerte impulso, me encantaba ver cómo la lechita chorreaba de a poco por su culito, y allí estaba, era un manantial de líquido blanco que rodaba suavemente impulsado por la gravedad, recorriendo todo el largo de la división vaginal. Ella comenzó a frotarse el clítoris, ya la tenía muy mojada, pero esos toqueteos estaban empeorando las cosas. De pronto ella recordó que llevaba puesto un tampón.
    
    - Mejor termino en el baño, no quiero que ocurra un accidente – diciendo esto se fue del cuarto.
    
    Volvió casi media hora después vistiendo solamente una bombachita negra. Me encontraba entre el sueño y la vigilia, aún desnudo. Estaba agotado pero sabía que si me dormía a esta hora de la tarde, luego me ...
    ... desvelaría en la noche. Ella se acostó a mi lado y acarició mi pecho. Me preguntó qué tal la había pasado y obviamente le respondí que de maravilla.
    
    - No te noto convencido – señaló.
    
    - Lo digo en serio – ya me estaba despabilando – de verdad me gustó mucho, hacía rato que no te daba por atrás.
    
    - Si puede ser. Pero te conozco como si fuera tu madre – me señaló con su índice como si se tratara de un arma de fuego – yo te voy a ser sincera, la verdad me encanta hacerlo con vos, pero siento que nos está faltando algo, como que la lujuria se va desvaneciendo de a poco – me limité a asentir con la cabeza – y por nada del mundo quisiera que nos pase lo que me pasó a mí con tu padre.
    
    - ¿Y vos qué proponés? – pregunté intentando aparentar ser maduro y comprensivo, pero a mí la verdad me bastaba con coger como perros en celo y llenar con leche alguno de sus agujeritos.
    
    - No sé. No se me ocurre nada. Tendría que ser algo que los dos disfrutemos mucho.
    
    - ¿Por qué no te acostás con otros hombres? Como hacías antes – no había ni pizca de malicia en mi comentario, se lo dije con sinceridad, aunque me preocupaba un poco lo que podría responderme.
    
    - Lo de antes fue porque estaba tremendamente insatisfecha sexualmente, fueron años de reprimirme. No me arrepiento de nada de lo que hice, disfruté mucho cada vez que me acosté con alguien, pero tal vez te falta comprender un poquito mejor a las mujeres. Mientras yo me sienta satisfecha sexualmente, no voy a recurrir a otros ...
«1234...13»