1. Follando con mi amigo casado


    Fecha: 14/11/2018, Categorías: Gays Autor: machirulo, Fuente: RelatosEróticos

    ... marcar otro cariz, entre los arboles se veían gente desnuda que bajaban de las dunas a ver a los que transitábamos por aquellos parajes, que como pude percibir, ya eramos unos cuantos ….El nerviosismo se apoderó de mi, cuando al pasar a la altura de un hombre de unos sesenta años, éste comienza a restregarse su desnudo paquete y a proferir no se que de preñarme. Casi estuve a punto de marcharme cuando vi un ejemplar de los que a mi me gustan: un tío de cuarenta y pocos, muy peludo, con una pinta de macho de padre y muy señor mio... Pero tristemente, le parecí invisible; pues ni se dignó ni a mirarme. Mi amigo JJ, dice que muchas veces los activos no me repelen porque no les agradé físicamente, sino porque tengo planta de machote y el primer pensamiento que se les venía a la cabeza era el de “pan con pan comida de tontos”. Es lo que tiene no llevar impreso en la frente la palabra versatil.
    
    Entre los matorrales que estaban a mi izquierda, se veía mas movimiento, así que decidí explorarlo aunque no se bien porque, un nerviosismo impropio comenzó a atenazar mi pecho de forma desmesurada y hasta molesta, así que me pare a descansar apoyado sobre un árbol... Varios de los que habían hecho aquel pequeño bosque su territorio de caza, me lanzaron mirandas insinuantes, pero mi estado anímico no estaba para nada en aquel momento; así que pase... Cinco minutos después y ya recuperado del pequeño ataque de ansiedad; mis ojos divisan algo que atrae mi atención.. Un chaval moreno, no ...
    ... muy alto ni delgado, algo musculado y con mucho vello...Tenía una mano metida dentro del pequeño bañador, mientras se chupaba un dedo de manera morbosa. Cuando vio que llamó mi atención, se dio la vuelta bajándose provocativamente el bañador y enseñadome parte de un culo que puso a funcionar mis más bajos instintos.
    
    Me masajee el paquete soezmente y el chaval respondió con un gesto similar, avanzó despacio hacia donde yo estaba como si del ritual de una bestia en celo se tratase; cuando estuvo a mi altura me miro levemente a los ojos, como buscando una aprobación; sus manos buscaron mi polla ,que estaba dura cual piedra, ante el morbo de la situación. ...Tiro de mi suavemente, y me llevo al cobijo de unos arbustos que nos esconderían de las miradas de los otros “cazadores” de la zona. Se agacho y sin mediar palabra, desabrochó mi cinturón, saco mi polla y empezó a mamarla. Tengo que reconocer que sin tener un pollón que quite el hipo, su tamaño y forma suele tener bastante éxito entre mis amantes.
    
    Cuando más enfrascado estaba mi acompañante en aderezar mi cipote con sus jugos bucales, veo como un tipo con barba de unos cincuenta años, vistiendo ropa de deportista, pasa corriendo a nuestro lado; hago ademán de sacarle mi nabo de la boca y vestirme, cuando el chaval con un acento bastante cerrado me dice:
    
    -No te preocupes, siempre está por aquí. Viene a ver pollas.
    
    Y sin alterarse, siguió chupando y esta vez si cabe, con más ímpetu, pues mi pajarito se había aflojado ...
«1234...8»