1. Maestra particular


    Fecha: 26/10/2018, Categorías: Hetero Autor: Ulpidio_Vega, Fuente: CuentoRelatos

    ... a rosas.
    
    La pendeja me había puesto como loco, pero no podía hacer nada sin saber cuál era la relación real con mi ex esposa. Me puso la verga dura cuando se agachó en el escritorio para ver las tareas de mi hija y sus enormes pechos se balancearon con sensualidad hacia adelante. No llevaba sujetador y casi se le escapa un pecho por el costado de la musculosa. Yo estaba en el sillón del living haciendo que leía el diario, pero no podía quitarle los ojos de encima a esa yegua.
    
    De pronto sentí que me llamaba. Le dijo a mi hija que la clase había terminado, la alzó, le dio un beso y la mandó para la habitación. Evidentemente tenía una muy buena relación con mi ex así que tenía que actuar con inteligencia para no quedar como un boludo. Así que no intenté nada.
    
    "Agustín – me dijo con tono serio a pesar de su carita angelical—vamos a tener que intensificar las clases de esta chica. Siento que no entiende y falta muy poco para el examen": Le dije que no había problemas y combinamos en que vendría el sábado a la mañana y el domingo a la tarde. Yo les había prometido llevarlos a la cancha, pero estaba seguro de que entenderían.
    
    El sábado cuando abrí la puerta me quedé helado. Lorena se había puesto un vestido floreado, bien apretado al cuerpo y lo suficientemente cortitos como para que sus piernas lucieran mucho más esbeltas. Tenía unas sandalias blancas, de esas que se atan al tobillo y me sorprendió un tatuaje que tenía en el hombro derecho. Se había atado el pelo con ...
    ... una colita y sus hombros estaban apenas cubiertos con las tiritas del vestido. Tenía anteojos para sol y escuchaba música con Spotify.
    
    Sin darme cuenta mi pija se había puesto dura contemplando ese terrible culo y un par de tetas que sobresalían del vestido con dos puntos a la altura de los pezones. Traté de taparme con el periódico para no pasar un papelón. "Hola Bebé, me parece que a vos también te vendrían unas buenas clases de apoyo", me dijo con picardía.
    
    Lorena se había levantado levemente los lentes y tenía sus ojos apuntando hacia mi pantalón. Subió la mirada y cuando llegó a mí, me guiñó el ojo y soltó una carcajada después de pasarse la lengua por los labios y mordérselos con actitud desafiante. Mi pija se puso más dura aún.
    
    Lorena advirtió mi presencia en la sala contigua al escritorio. Me quedé ahí esperando a ver si este minón me tiraba de nuevo alguna onda. Jugado por jugado pensé, a la mierda si tiene una buena relación con mi ex esposa, si me quiere coger, a coger y que se acabe el mundo.
    
    Estaba seguro que después de mi erección matutina ella se estaba divirtiendo jugando conmigo. Sus movimientos eran sexys, se acomodaba a cada rato el pelo y sus tetas sobresalían aún más. Tenían una forma hermosa, yo las miraba subir y bajar. De tanto en tanto le explicaba con voz sensual los ejercicios a su hija y se ponía el lápiz en la boca, sugerente. Noté también que me buscaba con la mirada. Yo me hacía el boludo, y seguía leyendo el diario.
    
    Con la excusa ...
«1234...»