1. Cuanto deseo


    Fecha: 26/04/2024, Categorías: Erotismo y Amor Autor: Calvin, Fuente: CuentoRelatos

    ... vez más fuertes para convertirse en pequeños gemidos de placer. No puedo con tanto, adoro tus labios, pero tu cuerpo se sentirá celoso de que no lo beso también. Bajo a tu cuello y recorro cada parte con mi lengua. Subo hasta tu oreja y de forma juguetona la muerdo un poco.
    
    Saco mi lengua y procedo a darte un estímulo generoso en esa área, para acabar diciéndote en un suspiro con voz ronca “cuanto te deseo”. Esto estremece tu cuerpo, me separo para admirar esa fase tuya de alto éxtasis. Tus gemidos no se hacen esperar, tienen bastante resonando en aquel salón de clases. No abres los ojos, no retiras tus manos de mi cuerpo, esto me permite seguir un poco más. Bajo con mi lengua recorriendo tu cuello hasta llegar al triángulo de las bermudas, cualquier hombre se sentiría perdido en una zona tan peligrosa como esa. Decido separarme, quiero admirarte una vez más antes de proceder.
    
    Esa figura, despeinada, roja, caliente, tan hermosa, tan mía. Me alejo solo un poco más mientras subes tu mano derecha para de forma coqueta morderte un dedo. Te bajas del escritorio víctima de nuestra pasión incontrolable y la alta adrenalina de lo prohibido de nuestras acciones. “Te tengo una sorpresa” dices al fin con una mirada provocadora y lasciva, una sonrisa con tintes pícaros.
    
    Procedes a quitarte la blusa mientras sin quitarte la mirada de encima atraigo una silla y así admirar un precioso espectáculo que venía. Con un lento pero sensual ritmo te despojas de toda tu ropa, es ...
    ... increíble como todo el día estuviste vestida así para mí, una fina y perversa lencería negra con mallas y ligueros, una tanga metida de forma perfecta para mi deleite y un brasier que parecía listón de regalo que ridículamente apenas ocultaba tus pezones, pero este supuesto misterio no hacía más que aumentar mi calentura. Por fuera, una vestimenta conservadora que aparenta ser niña buena y por debajo una deliciosa lencería digna de la más perversa mujer.
    
    Así eres tu, dulce por fuera, perversa por dentro. Te acercas con un contoneo sensual, cada paso que das marca los latidos de mi corazón inquieto por descargar tanta pasión acumulada. Intento pararme de la silla para tocarte toda y procedes a empujarme con tu mano derecha que antes me parecía tan delicada y ahora tiene control sobre mí. Te sientas arriba de mí, de frente, poniendo tus manos sobre mis hombros y acercando tus labios a los míos de la manera más provocativa posible, aunque a este paso, cualquier cosa que hagas me tiene en un trance de pura provocación.
    
    Me comes entera la boca, dominas todo con tu lengua tan juguetona y caliente. Te tomo de la cintura mientras poco a poco bajo a mi zona favorita de tu hermoso cuerpo. Tomo con mis manos aquella retaguardia que todo el día me tenia como loco. Hago círculos con mis manos acercando intencionalmente mis dedos tanto a esa zona húmeda y prohibida. Aumentas tus besos, aumento mis intenciones. Me salto la tanga, no puedo hacerte esperar tanto y procedo a tocar toda la ...