1. Violado por curioso


    Fecha: 14/03/2024, Categorías: Gays Autor: CesarPas, Fuente: CuentoRelatos

    ... nervioso. Inmediatamente se puso de pie y sin más intentó introducir su enorme cabeza a mi estrecho ano, entonces descubrí que no se había puesto condón, sino lubricante.
    
    Tenía mucho miedo y mientras él empujaba, comencé a sentir demasiado dolor, tanto que mis oídos se taparon por un instante y solo escuchaba un zumbido. Rápido comencé a explorar con mi mano derecha para ver que pasaba y si ya lo había metido todo, porque yo ya lo sentía todo adentro, pero me preocupé aún más cuando noté que solo había logrado meter su cabeza, que ya en sí era demasiado grande... y pensar que yo ya sentía que me había metido todo su miembro. Con todas mis fuerzas lo empujé con la mano, a la altura del abdomen, lo hice con bastante rudeza y creo que le dolió porque se dobló un poco y sacó lo "poco" que había introducido de su gruesa y larga verga. Entonces sentí un gran alivio.
    
    Por un momento pensé que había ganado, pero entonces él tomó mi mano y la dobló por detrás de mi espalda, me lastimó y logró someterme. Para colmo de males, con todo su cuerpo, me empujaba sobre la cabecera o piecera de una cama que me quedaba justo en la cintura. Cuando me empujaba me doblaba hacia la cama y si no me apoyaba con la mano que me quedaba libre sobre el colchón, me clavaba la piecera de metal en la cintura y me dolía. Además de que cada vez que él alzaba mi mano sometida me lastimaba el hombro y obligaba a agacharme.
    
    Terminé empinado de puntitas sobre el tubo de la piecera de la cama, sin calzones ...
    ... y con las nalgas paradas, con una mano apoyada en la cama para no lastimarme y la otra en mi espalda agarrada por este sujeto. Entonces sentí como me echaba un montón de lubricante en el esfínter y luego lo distribuía con su cabezota, ahí supe que había perdido la batalla... volvió a empujar su miembro con fuerza contra mi esfínter. Con el lubricante logró abrirse paso, me abrió todo, sentí como recorrió su miembro hasta el fondo de mi tripita y pude sentir sus testículos chocar por detrás de mi. Realmente me partió en dos, yo estaba sudando del dolor y del cansancio por mi postura tan incómoda.
    
    Ya estando dentro, ni siquiera permitió que mi cuerpo se habituara a su miembro, como si fuese un animal comenzó a bombearme con todas sus fuerzas y a un ritmo tan brutal que la cama comenzó a zarandearse y a rechinar. La gente de los lados ya estaba observando y comentando el espectáculo.
    
    Pronto se juntó un círculo de personas a los lados, nos miraban con muchísimo morbo y decían cosas como: "que pinche cogidota le está metiendo", "viste la vergota que le metió... y le entró toda", "lo va a hacer venirse", cosas de ese tipo. Algunos de ellos querían intervenir y agarrarle los huevotes o tocarme las nalgas o la verga y él los quitaba.
    
    Los primeros momentos para mi fueron solo sufrimiento y me parecían eternos, pero pronto comencé a sentir placer y no pude evitar gemir y echar grititos como una perra en celo. Parece que eso le excitó demasiado, ya que comenzó a jalarme de las ...