1. El Reencuentro


    Fecha: 05/03/2024, Categorías: Erotismo y Amor Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos

    ... sólo se besaban y se tocaban con desesperación. El piso vacío donde estaban era el mismo que usaron a veces hace veinte años para follar como animales. Los padres de Kiko se lo dejaron como herencia y estaba a la espera de una reforma para volverlo a alquilar. Lucía lo conocía bien, Kiko la llevaba todos los fines de semana, probando todas las camas, la bañera y hasta la terraza, donde en más de una ocasión algún vecino los había visto. La enorme cama de matrimonio seguía allí, y Kiko no dudó ni un minuto en tirar a Lucía de un empujón sobre el colchón. A Lucía le excitaba que Kiko le comiera el coño, de hecho el primero que lo hizo en su vida, fue él...hace veinte años. Estaba mojada, sentía la boca y el aliento desesperado de Kiko entre sus piernas, además del paseo descarado de su lengua por el clítoris y el perineo que le arrancaba gemidos y suspiros de placer. Uno...y otro...y otro...y otro más. Ella echaba fuera sus líquidos y Kiko los mezclaba con su saliva. Lucía se derritió de gusto cuando el dedo índice de Kiko entró en su vagina. Arqueó la espalda y lanzó un largo gemido de placer, mientras sujetaba la cabeza de su amante para que no se despegara. Sin pedir permiso alguno, Kiko llevó su dedo lubricado hasta el culo de Lucía, y estimuló la entrada. Los dos estaban como en un frenesí hasta que Kiko se puso de rodillas delante de ella, y levantando sus piernas, se las apoyó sobre los hombros. Sujetando su verga con la mano, la orientó hasta los labios vaginales de ...
    ... Lucía, y los rozó con el glande. Se desesperó, como se desesperaba cuando Kiko hacía aquella maniobra...hace veinte años. Y no se la metía hasta que ella le pedía a gritos que la follara, y que la rebosara con toda su leche.
    
    Cuando la penetró, lo hizo despacio buscando primero adaptar la vagina de su amante al tamaño de su órgano. Sin llegar a meterla del todo la sacaba, provocando la desesperación de Lucía. Cuando lo creyó conveniente, con un empujón de su pelvis la introdujo con fuerza arrancándole a su antigua novia un grito ahogado de placer. Kiko se abrazó fuertemente a las piernas de ella, y bombeó con fuerza hasta que el sonido del choque de ambos cuerpos, inundó la habitación.
    
    -¡Ah!...¡ah!...¡ah!...no pares, fóllame cabrón -le pidió Lucía, -dame fuerte pero no te corras dentro.
    
    -No has perdido las mañas, te gusta que te follen fuerte, ¡eh? -le replicó Kiko mientras el sudor le resbalaba por la sien.
    
    Cuando Kiko presintió el orgasmo, salió de ella y se masturbó terminando en una abundante corrida acompañada de un gruñido. El líquido caliente y viscoso terminó en las tetas de Lucía con el primer disparo, y el resto en el vientre. Hace veinte años eso hubiera terminado en un cabreo monumental por parte de ella, pero lo de Kiko fue instintivo. Se había acostumbrado a hacerlo, y dio por sentado que a su ex novia le gustaría. Lejos de enfadarse, Lucía se contuvo y aprovechando que Kiko se recuperaba, fue al baño a limpiarse. Cuando volvió, la verga de su antiguo ...