1. Siempre fuiste un misterio para mí (parte 2/3)


    Fecha: 02/02/2024, Categorías: Erotismo y Amor Autor: ericaCL, Fuente: CuentoRelatos

    ... de opinión si no te gusta”, me dijo.
    
    “No voy a cambiar de opinión”.
    
    Comenzó a mover su dedo hacia adentro y hacia afuera, y se inclinó hacia adelante, plantando un beso en la parte baja de mi espalda y luego pasando su lengua lentamente por toda mi columna, haciéndome temblar mientras lo hacía. Retiró su dedo y lubricó su pene. Sentí un momento de aprensión cuando su posición cambió, y sentí la cabeza de su miembro sondeando mi culo. Me mordí el labio y me armé de valor para la penetración inicial. Dolía, pero no tanto como yo esperaba. Era lento y suave. No había necesitado decir una palabra para que él supiera que éste no era el momento de ser rudo. Esta vez se trataba de ternura y novedad. No sabía qué esperar cuando me ofrecí a él de esta manera, pero a pesar de la incomodidad inicial, me gustó. Extendió una mano para acariciar mi clítoris. “Mmmmm,” dije, sintiendo el deseo ardiendo en mi vientre. Me estaba acostumbrando a tener su pene dentro de mí. El dolor ya estaba disminuyendo y comencé a moverme un poco, siguiendo su ritmo.
    
    Con su mano libre, levantó mi cabello y me plantó un beso entre los omoplatos, y luego una serie de besos subiendo hasta ...
    ... la nuca. Aceleró el ritmo y yo dejé escapar un chillido, agarrando las sábanas en mis puños. La necesidad de gentileza había terminado ahora y ambos lo sabíamos. No me estaba cogiendo con fuerza, pero me estaba penetrando profundamente, con movimientos lentos y rítmicos. Mi cuerpo respondió. Mi vagina estaba babeando por mis muslos.
    
    Me agarró por el pelo y tiró de mi cabeza hacia atrás, inclinándose hacia delante para plantarme un beso en los labios. Tomó velocidad y sus caderas comenzaron a moverse a un ritmo más rápido. Yo no esperaba disfrutar tanto de esto. Él nunca me había pedido sexo anal, pero de alguna manera yo había sentido que lo deseaba. Era ese deseo tácito de él lo que había despertado la necesidad en mí, que ahora estaba siendo satisfecha de una manera tan intensa e íntima. Queriendo conectarme aún más con él, me estiró hacia atrás y estrechó su mano, el nuevo punto de contacto nos acercó aún más, lo suficientemente cerca como para que yo alcanzara un orgasmo, gimiendo y gritando mientras se abría paso a través de mi cuerpo. Él acabó un par de minutos más tarde, y me estremecí de emoción al sentir su pene latiendo dentro de mí.
    
    Continuará... 
«12...78910»