1. El soplido del Diablo −2−


    Fecha: 01/08/2017, Categorías: Infidelidad Autor: chichikuilo, Fuente: CuentoRelatos

    ... cada centímetro de tan perfectas nalgas, ella al sentir el raspar de mi lengua gemía más
    
    —Mmm así Oscar, sigue así mi amor mmmm
    
    No me agradaba que mencionara el nombre de aquel fulano, pero dada las condiciones no me iba a aponer de exigente que dijera mi nombre y seguí en mi faena de ensalivar todas sus nalgas y empecé a bajar por el dorso de su muslo y entonces me llego a mi nariz ese olor que solo las mujeres emanan y que proviene de la caverna del amor, un olor fresco, agradable, apetecible y mi boca y nariz empezaron a dirigirse hacia su vagina muy despacio a base de besos y más lengüetazos empecé a abrirme paso entre sus nalgas y poder dejar al descubierto esa enramada dorada que tapaba con timidez su vagina, mi tía seguía gimiendo y nombrando al tal Oscar, entre más devoraba esa rica vagina mi pene se ponía más erguido y duro, las venas de mi miembro amenazaban con explotar y entonces en lo que le hacia el amor a mi tía con mi boca, me saque mi miembro y comencé a masturbarme de una forma desenfrenada que mi mano con mi miembro se fundieron en un solo objeto de placer, para esto mi tía seguía inconsciente y decía:
    
    —Si mi vida sigue así mmm, mmmm, mmmm
    
    Tanto quejido solo significaba que mi tía se estaba corriendo y así lo corrobore cuando empezaron a fluir sus líquidos vaginales y eso me éxito mucho más y apresure mi masturbación y con un quejido de ella y mío también me corrí tremendamente dejando en el piso las huellas de tremenda puñeta que me había ...
    ... impuesto al tiempo que deje de acariciar a mi tía y ella también cayó en un letargo de satisfacción y se durmió plenamente.
    
    Limpie con pañuelos desechables mi desorden ya que había tirado tanta leche que ensucie la alfombra del piso, parte de la sabana y brinco incluso en las pierna de mi tía, acto seguido me fui de la recamara de mi tía y me fui a mi cuarto con la mente rebobinando los instantes vividos en la recamara de mi tía Lulú; así pasaron varias horas y al atardecer llegaron mis papas con mi hermanita del famoso bautizo, mi señor padre venía con demasiadas copas encima y mi mamá venia cansadísima de haber estado cuidando a mi hermanita y a mi papá quien se metió inmediatamente a dormir y mi mamá todavía baño a mi hermana, plancho su ropa del uniforme, preparo las cosas del desayuno del día siguiente, paso a ver si mi tía no se le ofrecía nada quien se encontraba en su cama todavía durmiendo y me pregunto que como había estado, le dije que se había tomado sus medicamentos y que me había pedido que le untara la pomada en la parte de su espalda adolorida, claro que omití decirle del masaje extremo que le di y me pregunto que si quería algo de cenar a lo que le conteste que no y ella me dijo que entonces ya se retiraba a dormir ya que estaba exhausta y me dio mi beso y se fue.
    
    Eran como las 8:30 p.m. y mi casa estaba más silenciosa que un cementerio. Vi un rato más televisión y también me dispuse a pernoctar no sin antes volver a evocar lo sucedido en la mañana y cerré ...
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