Mi club de calenturientas: la Tarea - Relatos Eróticos

Mi club de calenturientas: la Tarea

Después de mi primera aventura de mi club de zorras, iniciamos con más aventuras, las cuales fueron completamente calientes para todos.

Paola y yo nos comportábamos como novios junto con Karla, me las agasajaba cuando me daba la gana, así como a las demás, aunque no tanto porque aun no les tocaba. Aun así accedían a meterles la mano bajo su falda cuando me daba la gana.

Después de haberme cogido a Paola, teníamos que seguir con nuestros lujuriosos planes, resulta que Karla y Paola tenían unas ganas descomunales de seguir cogiendo. Afortunadamente la maestra de biología nos reunió en grupos para hacer una tarea. Afortunadamente el número de miembros del grupo era los mismos de mi harem de zorras.

-Amor, mi casa estará sola el viernes, porque mi mama se va a trabajar, podemos “estudiar” allí – me comento al oído mientras le agarraba la pierna a Karla y le sobaba las nalgas a Perla

-Si amor, sirve de nos coges a las demás-contesto Karla mientras Perla daba un pequeño salto al momento de que le metía el dedo en el ano.

-Ok, hermosas – contesto viendo al resto- Perla al rato te doy una lista de cosas que deberás comprar para nuestra reunión.

Para esto Paola vivía sola con su mama ya que sus padres eran divorciados y de repente su mama se iba a trabajar en la tarde noche y en algunas ocasiones la guardia en su trabajo se extendía hasta el día siguiente, también hablo con su tía, con la que se iba para no estar sola, argumentando que tenía un trabajo muy ...

... importante y que tendría que estar en su casa, por lo que le dijo que si necesitaba algo le hablaría por teléfono. Para esto nuestras queridas putas del grupo ya habían hecho la investigación, por lo que teníamos la tarde libre.

El día que nos reunimos llegamos todos después de la escuela a la casa de Paola, yo tenía carro por lo que nos fuimos todos en el, afortunadamente Paola sabía manejar por lo que yo me fui en el asiento trasero con las demás, manoseándolas a mi antojo, mas de una ya estaban supe mojadas por lo que pude saber lo que me esperaba. Karla era a la que más atención le ponía por lo que me concentre más en ella.

-Amor ya quiero que nos la metas-comenta Laura cuando le pasaba el dedo por su raja- por lo que vimos con Paola y tu, nos pone calientes solo de pensarlo.

Llegando a la casa de Paola directamente en la cochera, nos metimos a su casa, al cuarto de Paola, para esto ella ya había comprado algunos juguetes que le había encargado, bolas chinas, vibradores etc.

Al momento de que entramos todas se abalanzaron contra mí a besarme y agarrarme el bulto, las quite de inmediato y les recite las reglas.

-Alto!!!-les grite- Deberán esperar a que yo las tome a mi voluntad, y me las cogeré como yo quiera-les dije con voz más calmada-al final todas y cada una serán mías y probaran el sexo, además de que cuando este ocupado con alguna o algunas de ustedes, las demás podrán divertirse sin penetrarse con estos juguetes-les dije alzando mi mano con los artilugios que ...