1. Violada y humillada por tres policias


    Fecha: 10/09/2018, Categorías: Infidelidad Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos

    ... estimular el ano. Yo lo apretaba y le decía que no por ahí no, pero no me hacía caso y seguía metiendo su dedo hasta que lo logro meter todo y lo dejo ahí unos segundos.
    
    Yo sentí como mi ano se empezaba a abrir poco a poco, y cada vez que movía su dedo sentía una sensación extraña pero placentera. Ahí empezó otra vez el mete y saca por mi vulva y al mismo tiempo me estimulaba el ano con el dedo. En eso me saco la verga de la vagina y la apunto en mi hoyo y me dijo:”te voy coger ese culito y te lo voy a llenar de leche”, yo solo gemía y asentía con la cabeza, en una de aquellas cuando me empieza a meter la cabecita por mi culito virgen, el no aguantó, la saco y eyaculo en mi espalda. Yo ya había tenido como dos orgasmos pero ellos no se dieron cuenta.
    
    Ambos policías se empezaron a vestir, yo creía que ya había terminado todo y me levante para buscar mi ropa. Cuando me doble para recoger mi blusa siento entre mis piernas algo grueso y duro y cuando volteo era el negro gordo asqueroso que me estaba arrecostando su pene y me dijo: “para dónde vas mamita si ahora viene la mejor parte, mis muchachos me reservaron ese culito rosadito que tienes para romperlo con mi vergota, pero antes me vas a dar una chupada de esas que tu sabes”.
    
    Me arrodilló se bajo por completo el pantalón y expuso ante mi cara su pene que era monstruoso, primera vez que veía uno negro tan grande, grueso con unas venas tan abultadas, las pelotas inmensas y muy pero muy peludo. El me cacheteaba con se ...
    ... vergota y yo solo quería mamársela para que todo terminara de una vez, aunque también en el fondo me dio morbo por meterme un pene tan grande como ese. Yo abrí mi boca y él me dio su cabecita y me decía:”eso es chúpala como si fuera una fresa”, yo la chupaba y sin darme cuenta hasta la mordisqueaba. Se la agarraba con las dos manos y lo masturbaba mientras se lo chupaba. Luego el me dijo: “abre grande esa boquita” y yo abrí lo mas grande que pude para poder mamarle el pene a ese hijo de perra.
    
    Solo me entraba la mitad de su pene debido a su tamaño, ya me dolia la boca, mis ojos llorosos le suplicaban que parara pero él me la metía como si se estuviera follando mi boca, hasta que agarro mi cabeza y me la quiso meter toda, yo no aguante y me fui en vomito, ya que sentí que me llego a las amígdalas, agarro mi blusa y se limpio el pene mientras que los otros dos malditos se burlaban de mi.
    
    Me dijo: “voltéate putita que te voy a perforar con este pedazo de verga”, yo me voltee y me puse en cuatro con mi concha abierta. Solo pensaba en el dolor que me causaría ese tremendo pedazo de carne cuando entrase en mi vagina. El escupió su polla y procedió a metérmela lentamente. Apenas me entro la cabeza de su pene solté un grito y mientras más la metía más me dolía, porque su pene se hacía más grueso a medida que se acercaba a su base. Cuando logro clavármelo todo yo tuve en orgasmo que no pude ocultar, chorros de flujo salían de mi chuchis como si fuera una fuente.
    
    El mal nacido ...