Mi mejor amigo - Relatos Eróticos

Mi mejor amigo

... mientras el iba al baño, me dirigí a la habitación matrimonial para ver la decoración, era una habitación muy cómoda,  piso con moqueta de buena calidad, una bella decoración nórdica y en una de sus esquinas un flamante sofá táctico,  me enrojeci solo de verlo y cerré la puerta. A lo cual Franco al salir del baño me observa perplejo mientras sigue el enrojecimiento de mi cara, entra a la habitación y me el sofá, se sonríe traviesamente y me dice - Que inocente eres, te enrojeces asi, como si nunca hubieras tenido sexo. Somos adultos, porque te avergüenza?. 
- No, no lo sé. No me lo esperaba, no especificarán eso en la publicación donde nos pusimos en contacto. 
- Bueno, no importa. Un simple sillón no influye en nuestra amistad, sabes que me gustas pero respeto que no desees intimar conmigo. Así que no te preocupes.
Una parte de mi se sintió segura a su lado y otra triste, rechazarlo podría ser un sacrilegio para muchas. Un hombre guapo, inteligente, comprensivo, con 45 años bien conservados, una buena posición económica, es algo que haría que cualquiera se entregase. Pero siempre he sido muy nerviosa y no me gusta tomar la iniciativa. Mientras pensaba todo esto tomando una cerveza sentada en la sala en silencio, el me observaba como si leyera mis pensamientos. Entonces se acercó a mi y me dijo - Bueno, esta puede ser la última vez que nos veamos, no te pongas tan pensativa, disfrutemos el tiempo que nos queda.
Estaba tan cerca que podía ver los detalles de su rostro ...

... como nunca antes, observe sus ojos, sus labios, su piel, su respiración agitada, su atractivo en todo su esplendor. Entonces me acaricio el rostro, con sus grandes manos y continuó - Es una lástima que no te haya conocido antes. Pero por lo menos estamos aquí juntos y coincidimos. Tal vez no seamos pareja, pero podemos disfrutar las cosas simples. Cierto? 
- Que cosas simples?
- La compañía... 
Algo en su tono de voz me molestó, no se que. Debio ser su desdén, que un hombre esté en un departamento con una mujer que le gusta, que le parece atractiva y no se atreva a nisiquiera a tocarla, me pareció ofensivo, pero lo entendí. Su respeto hacia mi era tan grande que no quería arruinar la relación que teníamos.
Entonces pensé, ya que importa, no nos vamos a ver más en la vida, nuestra amistad terminará de todas formas. Y lo besé. 
Lo besé y el correspondió, sus brazos comenzaron a rodear mi cuerpo, mientras sentía su húmeda lengua en contacto con la mía, nos abrazamos fuertemente mientras nuestros besos eran largos, sentía mis senos apretandose contra su pecho firme, sus manos comenzaron a juguetear con mi figura. Hasta que comenzó a acariciar mis senos, comenzaba a sentir como mi vagina se humedecia. Nos dirigimos a la habitación y me quitó la parte de arriba de la ropa dejándome al descubierto, observo mis senos con ansias y comenzó a acariciarlos y a besarlos, succionado mis pesones con ansias, mientras sentía el placer electrizante que me exitaba mojandome más y más, no pude ...