1. La bella señora en la casa de playa (sexo tropical)


    Fecha: 10/08/2022, Categorías: Sexo con Maduras Tus Relatos Autor: yoy, Fuente: Relatos-Eroticos-Club-X

    ... de nuevo me sirvió una cerveza y charlamos un poco.  Le dije, ya lo había pensado -vamos a la playa, al mar?-,  ella me se quedó pensando, antes que me dijera que no, agregué -no hay nadie en la playa y no es peligroso-.  Entonces ella asintió.  Sacó sus lentes de sol, toalla y un sombrero.  Nos fuimos, son como diez minutos caminando.  Llegamos y ella tiró la toalla a la arena gris, dejó sus lentes y sombrero.  El mar se veía tranquilo.  Caminamos hacia allí.
    
    Ella me dio la mano, y nos metimos al mar, entramos un poco y el agua apenas llegaba a las rodillas.  Seguimos más adelante y de pronto el agua nos llegó arriba de la cintura, el oleaje era mayor y más fuerte.  En eso ella gritó y me abrazó, -me da miedo el mar, te lo confieso- me dijo ella.  Pude sentir su par de senos contra mi pecho.  Salímos del mar y nos quedamos un rato en la playa asoleándonos.  Entonces ella me dijo -soy Cris, por cierto-, y yo le dije -soy Alberto, pero me dicen Beto-.  Al rato regresamos a su casa. Nos despedimos, pero ella me dijo que si yo iba al mar, la pasara recogiendo, ya que le había encantado el paseo en el mar.  hasta allí todo normal.
    
    Los dos días siguientes, fuimos al mar juntos.  Caminamos a la orilla, nos metimos, ella ahora me abrazaba dentro del mar con más confianza, yo podía sentir su piel y sus senos pegarse a mi cuerpo, en una ocasión sucedió tantas veces que tuve una tremenda erección, no quería salir del mar, para no ser descubierto por ella.  Pero sucedió, salimos y ...
    ... ella me dijo -mira como te haz puesto!, ja ja ja- ella se rio.  Y yo ya con más confianza le respondí -es tu culpa, porque usted se pone cada traje de baño de infarto ja ja ja-.  En eso nos tiramos a la arena, ella me dijo que quería broncearse y me dio un bote de bronceador, quería que se lo aplicara, -Ella se acostó boca arriba, asi que le fui poniendo fuera de su bikini parte de arriba y luego abajo, cuando mis manos pasaron por su estomago y muslos, mi erección volvió.  Ella se volteo y quedaron sus buenas nalgas ante mi, de verdad eran muy buenas, le eché bronceador y ella se zafó el sostén del traje de baño y le apliqué en toda la espalda, lo hice arriba y abajo de sus nalgas, mi erección era monumental.  En eso se volteo y por un momento perdió su sosten, pude ver sus maravillosas tetas maduras, con una aureola grande y en el centro sus pezones, que no se porque estaban paraditos, o sea que la señora se excitó cuando mis manos recorrían su cuerpo.  Se disculpó, pero yo ya le había visto sus hermosos senos.  Desde ese momento las cosas entre ambos ya no fueron igual, ella ahora era más confianzuda, nos fuimos casi abrazados de regreso, me invitó a meternos a las piscina de su casa, cosa que no había hecho antes.  Entramos y como suele suceder nadamos y comenzamos una pequeña batalla de echarnos agua, nos tomamos de las manos forcejeamos y luego nos abrazamos, por un instante pensé que nos besaríamos, pero ella se apartó en el último momento.  Bebimos un par de cervezas ...
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