1. Mi concuña no tiene escrúpulos


    Fecha: 17/07/2018, Categorías: Sexo con Maduras Autor: buenaventura, Fuente: CuentoRelatos

    Sucedió hace más de 25 años éramos novios mi mujer y yo, su hermano andaba de novio con quién sería en un futuro mi comadre.
    
    Se casaron primero y con el correr de los años tuvieron a su primera hija, a quién nos ofrecieron para ahijada, y fue cuando inició el contacto inicial sin que llegara a suceder nada, tendríamos en promedio 26 años entre los 4.
    
    Convivimos muy de cerca 34 años después y aún en las fiestas familiares teníamos un acercamiento demasiado personal, sobre todo en los bailes ya que en ellos se daban acercamientos físicos muy eróticos, y que debido a la familiaridad con que llevábamos la amistad no pasaba de haber los roces sexuales en los bailes en donde terminaba realmente mojado, y que debido a ello cuando llegaba a casa con mi mujer tenía una sesión de sexo realmente increíbles, lo que debo agradecer desde entonces a mi comadre a quién llamaremos mena, que en realidad era o es una mujer realmente ardiente.
    
    Esto lo menciono debido a que en más de una ocasión en la fiestas y reuniones familiares cuando bailaba con su hermano en verdad me calentaba la mente la forma en que se rozaban físicamente y a la vez me daba envidia, pero cuando me tocaba bailar con ella en verdad me desquitaba con el roce de mi miembro en su cuerpo y que a la vez no re huía debido a que desde entonces esperaba que pasara algo más que un simple roce físico sexual al cual en realidad yo rehuía.
    
    Lo anterior debido al acercamiento familiar, los tabúes a los que estábamos ...
    ... orientados y demás tonterías de tipo moral que seguramente nos afectaban a ambos.
    
    Sin embargo con el tiempo al crecer las ahijadas, tornarse señoritas y presentarse para entonces en unos verdaderos ángeles del cielo, así como la consiguiente edad que nos da la sabiduría del deber no cumplido cuando existían las fuerzas sexuales se presentó la ocasión en que la carne en verdad fue la llama que inhibió todo escrúpulo que podría existir entre nosotros.
    
    Sin embargo relatare los previos a mi relato que dejaran en claro las circunstancias que nos llevaron al final de este relato.
    
    En una de tantas fiestas que tuvimos en familia al calor de las copas como ya mencione los fajes eran evidentes terminando con unas venidas que a la postre pagaría mi esposa.
    
    Fueron incontables las ocasiones en que las bailables excitantes con mi comadre llegaban casi al clímax sin que de ahí pasara. Para entonces sin darnos cuenta (ya que no queríamos darnos cuenta) debido a que teníamos una relación en realidad de familia, siendo nosotros los padrinos únicos de sus hijas además de ser concuños nos separaba y a la vez nos ponía más cachondos.
    
    En alguna ocasión cuando a mi comadre se le pasaron las copas por tener un altercado con mi cuñado, debí intervenir para evitar que se lastimara mi comadre de tal suerte que al protegerla para que no se hiciera daño, y el contacto físico nos hizo perder los estribos y fue la primera vez que tocamos nuestros sexos y la primera vez que introduje mi miembro en su ...
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