Mi dulce hermanita - Relatos Eróticos

Mi dulce hermanita

No sé exactamente cuando comenzó todo. Ella tiene actualmente 28 años y sigue teniendo una belleza extraordinaria. Es alta de 1. 70, pelo castaño y un muy buen cuerpo a pesar de que ya es madre. Tiene unas tetas normales, pero eso si un culo precioso, y unas piernas que parecen degollar a uno cuando se esta adentro. Es morena clara y también llama la atención su linda boca que parece una ventosa, pues tiene labios gruesos y unos dientes casi perfectos. No se puede decir que se vive tranquilo teniendo ese culote tan cerca y casi siempre con la polla bien firmes.

Recuerdo que ella tenia 18 recién cumplidos y hasta ese dia no la había visto como mujer. Y es que un dia cuando regresaba de la escuela con ella, un amigo me hizo un comentario. -oye carnal que buena esta la niña eh, cuídala por que ya es cacha reglamentaria-desde aquel dia me quede con la espina clavada y solo esperaba la menor ocasión para confirmar si era cierto lo que me habían comentado. Un sábado en que ella se preparaba para ir a jugar básquet, se puso unas licras de color blanco y me di cuenta de que llevaba unas braguitas de figuritas ya que se le notaban muy bien. Pero lo que más me llamo la atención fue el hermosísimo culo que tenia. Sus labios se le marcaban de lujo y rápidamente tuve una erección que me puso a mil. Desde aquel dia creo que no la pude olvidar nunca, pues en vez de ir haciéndolo la soñaba, la alucinaba etc.

En pocas palabras, me había encantado tallarme la polla pensando en mi ...

... hermanita.

Yo tenia 19 y hasta ese entonces solo había tenido algunas aventurillas y folladas con amigas de la escuela. Solo deseaba regresar a casa para encontrar a mi hermana y ver ese culito que me enloquecía. Muchas veces al regresar de la escuela, ella se dormía y tardaba mucho en despertar.

A parte de tener el sueño pesado, se ve que ya taimen pensaba en el sexo igual que yo, pues tan pronto caía dormida yo presto me aventaba sobre ella para mirar su dulce vagina que se le marcaba de maravilla en su short. La verdad es que nunca había estado tan excitado, podía sentir su respiración, su olor, su calentura y esta allí para mi solito. Como dormíamos en el mismo cuarto ella se levantaba temprano para arreglarse y así fue comencé a espiarla. Primero se bañaba y al salir rumo al cuarto se empezaba a secar su pelo, parecía un ritual, primero sus braguitas, su brassiere, y por ultimo su uniforme de la secundaria.

Como adoraba verla poniéndose sus medias en esas piernas que empezaban a ser espectaculares casi me venia en seco y al ponerse la crema uuuuu me ponía a mil casi podía ver su entrepierna, claro mientras yo me hacia el dormido.

Así pasaron meses y una noche en yo dormía con mis manos en la macana, me desperté al notar la presencia de mi hermana frente a mi cama. No sé si ella estaba dormida o despierta lo que paso después fue que dijo—oye te estoy esperando hazte para allá y déjame dormir contigo-

Y o me quede como piedra y le hice caso, para ese entonces m ...