1. Las tres primas de mi esposa


    Fecha: 30/06/2018, Categorías: Anal Sexo con Maduras Sexo en Grupo Autor: Anitaslut44, Fuente: xHamster

    ... estaba observando.De pronto Verónica salió del agua y se secó apenas con una toalla. Luego entró en la casa. Antes de que me diera cuenta, estaba parada a mi lado.“Te gusta lo que ves, primito…?” Me preguntó ronroneando como una gata.“Claro que me gusta, nena… ya deberías saberlo…” Le respondí.Entonces se dirigió a los hombres que estaban descargando cosas del camión y les pidió que regresaran a la casa de Mariana, con la excusa de que habían dejado allí varias cosas importantes.Se volvió con una sonrisa y me dijo que esos hombres tardarían un par de horas en regresar, ya que, a esa hora, el tránsito en la ciudad era algo peor que insoportable…Entonces me espetó sin anestesia y sin ruborizarse:“Serías capaz de satisfacernos a las tres…?”Yo no podía creer lo que esa nena me estaba diciendo; pero era un sueño hecho realidad; entonces le respondí que lo intentaría al menos…Unos instantes después, mi cuerpo completamente desnudo estaba tendido sobre una toalla y esas tres perras lo acariciaban con sus delicadas manos.Por supuesto, la más atrevida era Verónica; que directamente agarró mi verga bien erecta y tan dura como una roca. Empezó a hacerme una tremenda paja a toda velocidad. Tuve que pedirle que se calmara un poco, porque de lo contrario me iba a hacer acabar antes de tiempo y para colmo, en su propia cara, en esa cara de puta que me volvía loco…Pero en vez de desalentarla, mi pedido le provocó más morbo todavía y siguió dándome con su mano arriba y abajo. Mientras ...
    ... Laura me lamía las bolas y Mariana me comía la boca en un beso profundo.Finalmente acabé y Verónica apuntó la cabeza de mi verga hacia mi propio vientre y toda mi leche fue a parar allí. Las tres primas se abalanzaron desesperadas a lamer ese semen fresco; que era una cantidad abundante.Entonces pensé que ya todo se había terminado; ya que iba a necesitar un buen rato para recuperar la dureza de mi verga; pero no fue así…A ninguna de las tres se le ocurrió preguntarme nada; siguieron adelante.Verónica aprovechó que estaba todavía allí abajo y comenzó a pasar su sedosa lengua a lo largo de mi pija, haciendo que no perdiera la erección.Me la dejó bien dura y limpia. Entonces se levantó para ir al baño a lavarse la cara y quitarse el semen que le había quedado en las mejillas, ya que la muy perra había acaparado mi verga casi para ella sola, dejándole muy poco a las otras dos…Mientras Verónica no estaba, Laura puso sus labios vaginales a la altura de mi boca y no hizo falta que dijera nada más. Comencé a mover mi lengua lamiendo su clítoris inflamado y ya bastante humedecido.Mariana se sorprendió al ver cómo su hermanita disfrutaba de mi lengua; pero Laura entre gemidos dijo que había hablado con Anita y mi mujercita le había confesado que yo le comía la concha de una manera deliciosa.La turra suspiró, gimió y tembló un poco, diciendo:“Puedo dar fe que nuestra prima Ana dice la verdad…”Al escucharla me esmeré un poco más y pronto pude notar que su concha dejaba salir jugos de una ...