El casamiento de Naty - Relatos Eróticos

El casamiento de Naty

... dio la mano para bailar sensualmente mientras me metía manos por todo mi cuerpo, ya mi concha soltaba jugos por doquier.

Me subió mi musculosa y al sacármela, mis tetas saltaron contra su pecho, baje el cierre de su campera roja, besándole cada rincón de esos músculos, beso mi boca con pasión, lamio mis lóbulos de las orejas, chupo mis pezones duros. Mire a las demás y todas estaban como en trance con el chico que le toco, preparándose para ser penetrada por esos verdaderos monumentos.

Mi hermoso guardavidas, bajo el cierre de mi minifalda y esta cayo para dejar mi concha al aire y lista para ser poseída por una hermosa pija.

Me arrodille frente a el, tire hacia abajo esos ajustados pantaloncitos dejando en libertad una hermosa verga, dura, venosa y a milímetros de mi boca. La abrí, metiéndomela como si fuera el mas dulce de los caramelos.

A ni derecha, Naty cabalgando ya a su soldado y a la derecha, Romi, en cuatro patas con un indio bombeando dentro de ella.

Continúe con mi mamada, algunas gotitas de liquido pre seminal salían de su glande, los lamí y trague.

El me tomo de mis brazos y me recostó en la cama, abrió mis piernas y chupo mi concha para lubricarla, no hacia falta, ya estaba bien mojada con los labios rojos que contrastaban con mi piel blanca.

Se puso el forro con una rapidez que solo los profesionales tienen, abrió mis piernas y me penetro fuerte y profundo que hizo que acabara en forma inmediata. Me dio un mete y saca intenso y los aullidos ...

... de todas las mujeres en ese cuarto eran ensordecedores. Mis orgasmos eran uno de tras del otro y no solo por la cogida que este pendejo me daba, ver a las otras chicas estaqueadas ayudo también.

Se freno de golpe, me dio vuelta poniéndome en 4 patas, me lamio mi ojete, este niño quería hacerme el culo y yo muy dispuesta a eso.

Me lamio mi agujero con pericia, le dio temperatura y su lengua ayudo a dilatarlo. Se puso detrás, yo baje mis pechos hasta e colchón y subí mi cola para que quedara en pompa y lista para que entren en ella.

Jugo un rato en la puerta de mi culo hasta que entro la cabeza, me tomo de la cintura y centímetro a centímetro me la metió hasta las bolas.

Cuando sintió que hizo tope, comenzó su baile dentro mío, en ese momento sentí la cabeza de Naty a mi lado. El soldado la había puesto boca arriba y con sus piernas al hombro estaba taladrando su concha.

Con el guardavidas abotonado a mi culo, me moví para poder chupar la tetas de Naty y ellas las mías.

La cara de asombro de las otras chicas era para fotografiarlas, si bien sabían que nosotras éramos muy liberales, para no decir muy putas, no tenían idea de nuestra relación lésbica incestuosa y para que su asombro aumente, nos besamos con mucho juego de lenguas.

Esa pose calentó incluso a mi amante momentáneo que me sujeto fuertemente de mi cintura para poder entrar hasta el fondo de mi cuerpo, sintiendo por sus temblores que estaba acabando, eso acelero mi orgasmo, acabando con el niño en ...