1. Córrete dentro y preña a mamá, hijo


    Fecha: 01/12/2022, Categorías: Incesto Autor: Kiko, Fuente: CuentoRelatos

    ... coño. Bibiana exclamó:
    
    -¡Diosss!
    
    Aquella verga gorda y dura la había llenado el coño cómo nunca se lo habían llenado. Se puso a cuatro patas. Pedro la agarró por las tetas y le dio leña, le dio a romper hasta que paró para preguntarle:
    
    -Me gustaría correrme dentro de tu coño, Bibiana.
    
    Las palabras de su hijastro la dejaron a cuadros.
    
    -¿¡Me quieres dejar preñada!?
    
    Pedro le puso las cartas sobre la mesa.
    
    -Si, si vas a tener un hijo quiero que sea mío.
    
    Le volvió a dar a mazo. Paró cuando sintió que se iba a correr.
    
    -¿Me corro dentro, Bibiana?
    
    Bibiana estaba tan perra que solo le faltaba ladrar.
    
    -Corre.
    
    La folló despacito, luego sacó la verga empapada con sus jugos, la frotó en su ojete, le metió la puntita, la sacó, la puso en la entrada del coño, y le preguntó:
    
    -¿Preparada?
    
    Bibiana ya había tiempo que estaba preparada.
    
    -Sí, préñame.
    
    Pedro jugó con ella. La volvió a frotar en el ojete, ojete que se abría y se cerraba. Le metió el glande. No era la primera vez que se la metían en el culo, pero fingió que le dolía.
    
    -¡Ayyy! Me acabas de romper el culo.
    
    Pedro estaba empalmado cómo un toro, la sacó, la dejó en la entrada del ojete y después se la volvió a frotar. Bibiana, perra perdida, le dijo:
    
    -¡Mete, mete, mete donde sea, pero mete!
    
    Esperaba que se la metiera hasta el fondo del culo, pero se la metió en el coño de un chupinazo. Con la verga en el fondo, sintiendo cómo se corría dentro de ella y sintiendo cómo le amasaba ...
    ... las tetas, movió el culo de delante hacia atrás y alrededor hasta que su coño apretó la verga de Pedro y comenzó a bañarla con una tremenda corrida.
    
    Nunca se había corrido al mismo tiempo que ningún hombre y le encanto hacerlo.
    
    Al acabar se echó boca arriba y le dijo:
    
    -Te saliste con la tuya.
    
    -Aún no te quitaste el camisón.
    
    -¿Es que quieres seguir?
    
    -Quiero follarte hasta que no puedas más. Quiero que acabes rendida de tanto correrte.
    
    Bibiana sonrió por primera vez.
    
    -¿Rendida yo? No sabes donde te has metido.
    
    Bibiana se quitó el camisón. Pedro, le preguntó
    
    -¿Me dejas que te ate a la cama?
    
    -Ata.
    
    Pedro salió de la cama, cogió la cuerda le ató las muñecas con ella y después la ató a un barrote de la cama.
    
    Lo primero que le hizo fue pasarle la verga morcillona por los labios. Bibiana sacó la lengua, y se la lamió, luego se la metió en la boca y Bibiana se la mamó. La verga se puso dura. Cuando la sacó besó a Bibiana con lengua al tiempo que le pasaba un dedo entre los labios vaginales, para luego acariciar con él su clítoris. Lamió su axila izquierda, lamió el pezón de la teta izquierda, luego la axila derecha y acto seguido el pezón. Le cogió las tetas con las dos manos y magreándoselas lamió y chupó pezones y areolas con una delicadeza exquisita. Luego pasó a su ombligo e hizo círculos con la lengua sobre él antes de bajar al coño. Al ir a lamerlo vio que estaba abierto y baboso. Le pasó la lengua al rededor del capuchón del clítoris, luego ...
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