1. El abuelo (Parte 2)


    Fecha: 26/11/2022, Categorías: Gays Autor: janpaul, Fuente: CuentoRelatos

    ... entretuve con el ordenador para tomar sueño. Luego me acosté con mi slip sobre la cama sin cubrirme con la sábana, porque ya tengo calor. Si tardo en salir a la cocina a comer el desayuno, mi madre me viene a despertar, pero mi sueño fue ligero y me desperté temprano varias veces y a las seis de la mañana ya estaba yo en la ducha, me había pajeado y me había puesto dos collares y varias pulseras. Vestido con una tanga cuerda, el short vaquero muy corto y la camiseta de tirantes amarilla que esta me cubría bien los dos pezones, me calcé las zapatillas y fui el primero en ir a la cocina. Ayudé a mi madre a preparar el desayuno y le pregunté dónde iba a ir a comer. Me dijo que saldría con Laura a la playa y comerían en algún chiringuito. Le indiqué que fueran a la playa del Torn —mi madre es naturista y nos ha hecho a toda la familia naturistas en casi todo—, y se lo pensó. Aún no sé si fueron o no.
    
    Cuando llegó mi padre me dijo:
    
    — Antes de decirte buenos días he de recordarte que aún no has recogido tu dinero.
    
    Salí y había un sobre con 300 euros y una tarjeta con un pliegue donde estaba la clave. Entré, le di un fuerte beso a mi padre. Desayunando me explicó lo que tenía que hacer con la tarjeta. Mi padre salió de casa como siempre, deprisa y yo lo acompañé a la puerta. Se fue mi padre. Fui a llevar a mi hermana el desayuno a la cama. Estaba durmiendo desnuda, la desperté tras taparla un poco, pero no le dije nada. Cuando puse la camarera sobre la cama y me agaché ...
    ... para dejar la bandeja, me metió la mano por la cintura hasta la nalga para saber qué llevaba.
    
    — Muy guapo ha de ser tu chico para ponerte tus tangas más pequeñas.
    
    — Igual no es tan guapo como imaginas, pero sabio, inteligente y muuuuyyyyy amoroso. ¿Sabes?, me gusta mucho.
    
    Ella levantaba la cara diciendo también «Muuuuyyyy amoroooosooo. Me dio un beso, le di un beso y me fui. Besé a mi madre y salí de casa. Ya había llegado Anselmo, subí al coche, lo llené de besos correspondidos y partimos en dirección a Tarragona, eran las 8 en punto.
    
    Como ya habíamos desayunado en casa, nos pusimos a ser turistas, primero la Catedral, la vimos lentamente, luego dimos un paseo por el centro de la ciudad. Tomamos la Rambla Nova para irnos al Balcón del Mediterráneo, el Anfiteatro, la plaza del Rei, la Torre del Pretoria y el Circo, el Forum o Plaza del Forum y nos fuimos al restaurante.
    
    Ya lo tenía todo acordado y reservado. El camarero no tardó en traer un cava de Sant Sadurní d’ Anoia dentro de una cubitera con hielo, lo abrió delante de nosotros sin hacer ruido, sirvió en las dos copas, desapareció y al poco rato vino con una fuente de almejas rodeadas de hielo y vivas. Probé la primera imitando a Anselmo con miedo de que no me gustara, ya que nunca las había probado. Hummm..., era como tomarse un sorbo de mar sin atragantarse, ¡que ricas son! Miraba a Anselmo tan feliz de haber acertado que me emocioné. Como había una docena, nos tomamos seis cada uno, eran seis sorbos de mar ...
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