Las cuatro esclavas (Cap. 2): Aprendiendo obediencia - Relatos Eróticos

Las cuatro esclavas (Cap. 2): Aprendiendo obediencia

... mi excelente reputacion de adiestraddora de fieras indomables que terminaban siendo tapetes para acolchar los pies del Amo de la perras.

Unos días más pasaron y ya las estupidas ya no solo habían perdido por completo su voluntad, sino que ahora ya ni recordaban quienes eran o como habían llegado a mis pies. Ya sus gustos culinarios habian sido modificados, ahora la comida a la que estaban acostumbradas, ahora su propio paladar la repudiaba haciendo que ahora para ellas fuera un platillo de alta cocina aquellas croquetas de perro y hasta la caca que tanto odiaban una semana atras.

Había llegado el momento de llamar a mi clienta para que calificara el cambio hasta ese día se había logrado en cuanto a la obediencia, ya que la próxima fase de adiestrmiento era aprender a estar desnudas cien por ciento, bajar la cabeza y saber que al llegar el Amo o Ama debían inclinarse a besar sus pies ya fuera al llegar de la calle o simplemente al ser llamadas ante su presencia.

Toda esta espera en su adiestramiento había valido la pena, ya que la clienta estaba asombrada que habían tenido sus hijas al pasar de ser unas frivolas que solo se dedicaban a comprarse zapatos, ropa cara, pintarse las uñas y pasarsela en el country club, ahora eran a simple vista unas autenticas criadas totalmente sumisas y abatidas y sus recuerdos totalmente bloqueados a tal grado que sus propias hijas ni la reconocieron y sin ningun problema se le acercaron a besarle los pies y acatar cada orden que ella les hizo cumplir cabalmente.