1. Mi vecina me mira y le gusta


    Fecha: 08/05/2022, Categorías: Masturbación Autor: Legasex, Fuente: CuentoRelatos

    ... piel lo máximo que pude de nuevo y deje caer de mi carnosa boca un poco de saliva hasta mi ardiente capullo, la volví a subir y a bajar, y otra vez a subir, bajar ¡dios! el ruido de mi polla mojada con mi saliva me hacía imaginar que la estaba penetrando toda y muy fuerte.
    
    El ritmo de mi mano recorriendo cada rincón de mi polla era increíble, no podía parar de mirarla y de masturbarme, aquella paja me estaba sabiendo a gloria.
    
    Me bajé los pantalones hasta los tobillos para dejar mi mano izquierda libre y comencé a acariciar mis testículos fuertemente, los apretaba, los soltaba, los sacudía, pensando en su boca, todo era poco en aquella situación, quería llegar al orgasmo ya, pero aquello sabia tan rico que aguante hasta el límite.
    
    Volví a mirar y de repente vi como ella miraba hacia mi bloque, aquello me hizo sentir algo extrañísimo, de repente paso por mi mente que aquello que ella estaba haciendo estuviera premeditado y que yo no me había dado cuenta, pero seguí masturbándome con fuerza.
    
    Mis gemidos mezclados con mis respiraciones cortadas inundaban la habitación, tenía miedo de que mis compañeros de piso me oyeran, pero no podía evitar gemir tan fuerte.
    
    Bajé la mirada para ver mi polla y aquello era tremendo, la tenía hinchadísima y con la fuerza con la que la apretaba para masturbarme hacía que pareciera que iba a reventar.
    
    Comenzaron a salir las primeras gotas de semen de mi polla avisando de mi gran orgasmo las cuales extendí con mis dedos suavemente ...
    ... por toda la superficie de mi capullo, era tremenda esa sensación.
    
    Ya no podía aguantar más y quería correrme y correrme como nunca, llenarme el pecho de semen y notar como mi densa crema escurre por él.
    
    Miré a la ventana de mi vecina y la vi de pie, no paraba de masturbarse, de repente vi como con la mano con la que se pellizcaba los pezones comenzó a saludarme, me hizo un gesto extraño dándome a entender que estaba a punto de correrse también y después sin ningún tipo de pudor e intentando llevar la situación al límite se la llevo a la boca y comenzó a masturbarse por detrás.
    
    Yo ya no sabía qué hacer, no me lo podía creer, me había estado observando sin yo darme cuenta desde el principio, sentí una mezcla entre deseo, timidez y… de repente noté como mi polla no aguantaba más aquel ritmo y necesitaba correrme ya. La mire y vi como ella había puesto un pie encima de la mesa para que yo pudiera ver mejor su mojado sexo.
    
    Me puse de pie, la mire y aumente la velocidad con la que me estaba frotando, no podía parar aquello, me iba a correr y quería que ella viera todo perfectamente, arquee la espalda, la mire fijamente, me puse de puntillas y comencé a correrme de una forma brutal, salió primero un borbotón enorme que cayó en mi muñeca, de nuevo hice fuerza y volví a echar aún más crema por todo el suelo de la habitación, no podía parar de frotar toda mi polla, aquel orgasmo me recorría todo el cuerpo, mis gemidos eran prácticamente silenciosos ya que mi pareja dormía, ...