1. La Hermana Mayor que todos Compartimos


    Fecha: 20/07/2017, Categorías: Sexo en Grupo Sexo Interracial Autor: AkuSokuZan, Fuente: xHamster

    ... cual agarrándose su miembro lo apuntó contra mi vagina y la penetro desesperadamente mientras mordía y lamía mis pezones. El que estaba detrás de mí estampó su glande contra mi ya ocupada vagina y comenzó a buscar un hueco por donde meterla.— P-Por favor… —supliqué exhausta cerrando los ojos al sentir el roce de su mástil contra mi labios exteriores—… No…— Te va a encantar tener dos pollas en este sucio coño —dijo el que estaba detrás mío.— Me vais a desgarrar…— No creo, ya tienes el coño bastante agrandado.— Eso no e… —comencé a replicar, pero fui cruelmente silenciada con una estocada de un segundo cilindro de carne. Tuve que morderme tanto los labios superiores como los inferiores para contener mis gemidos—.D-Duele…— Mientes, si tanto te doliese estarías gritando y no gimiendo como una perra —Me contradijo el de abajo, y entre los dos empezaron a darme des-sincronizadas embestidas que chocaban de forma claramente inexperta contra la boca de mi útero; cada vez que uno retrocedía hasta el punto de sacarme su rabo casi por completo, era nuevamente empalada por el pene del otro. Posiblemente el que estaba encima se llevó los dedos a la boca y después los estampó en mi clítoris moviéndolo en círculos sin dejar de penetrarme. El placer tanto interno como externo, los dos glandes aporreando la entrada a mi útero, los sobeteos y esa lengua sucia lamiendo mis pezones y el pubis del que estaba situado detrás de mi chocando violentamente contra mis muslos.Entrecerré los ojos mientras ...
    ... sacaba la lengua desesperada por dar el beso más sucio posible al que estaba situado abajo. Este gustoso sacó la lengua y nos lamimos mutuamente de forma oral.El de arriba metió también uno de sus dedos por el culo añadiendo una nueva fuente de placer. Ya no me dolía y mi culo se había acostumbrado a las intromisiones exteriores.— ¡Ahhhhh! —chirrié incapaz de contener el gemido al sentir el orgasmo más brutal que había sentido en todo el día, fruto no solo de la infinidad de sensaciones que me abarcaban sino también de aquella sensación que me hacía sentir sucia. Uno de los dos se corrió dentro de mí mientras clavaba sus uñas en mis nalgas, haciendo el orgasmo más placentero e intenso. Mientras este se quedaba quieto el de abajo continuaba meneándose hasta que con una última embestida me hizo vomitar vaginalmente semen.Sin dar más de mí me dejé caer sobre él, aplastándolo con mis pechos. No pareció importarle. Nos quedamos muy quietos los tres. Yo no quería hablar, tampoco que me dijeran nada. No quería moverme ni que ellos se movieran. Quería quedarme así y dormirme para perder la noción del tiempo otra vez.Sus penes en mi interior empequeñecían con pequeños espasmos, los míos en cambio eran más violentos. Noté como el semen entre mis piernas se filtraba hasta las sabanas de mi cama.El que estaba tras de mí sacó su pene y tras unos segundos por el rabadillo del ojo vi un flash. Me acababa de hacer una foto, pero yo no tenía fuerzas para alzarme y quitarle el móvil.Sabía las ...