1. Tu y el encargado


    Fecha: 21/01/2022, Categorías: Hetero Autor: Legasex, Fuente: CuentoRelatos

    ... imaginó sin ropa, no contestó, él la puso junto al escritorio y la doblo hacia delante, estaba tan cansada que antes de decir algo, ya masajeaba sus hombros, esa sensación no le permitió hablar, estaba sólo sintiendo esas manos, él las metió bajo la camiseta, ella quiso incorporarse, pero tenía unas manos de hombre sobre su espalda y no quería dejar de sentir eso.
    
    Le desabrochó el sujetador, ella no protestó, siguió acariciando su espalda, tomó unas tijeras y le cortó la camiseta, ella no lo notó, estaba flotando y no quería despertar, lo disfrutaba más, le bajo el pantalón ajustado solo para descubrir que ropa interior llevaba, el solo verla desnuda fue suficiente para que él tuviera una erección, pero el pantalón oprimía su pene y le dolía.
    
    El masaje siguió desde el cuello hasta las nalgas, ella estaba perdida, se dejaba llevar por lo que sentía, él movió las manos a los lados de la espalda y sintió los senos presionados sobre el escritorio, él le abrió las piernas y ella no protestó, estaba tan a gusto.
    
    Se desnudó, ella no lo notó, le puso aceite en la espalda y ella se perdió aún más, ella empezó a mover sus nalgas suavemente y sin pensarlo le metió aquel miembro de un impulso, ella chorreaba y eso facilitó la entrada, quiso levantarse y él le puso las manos sobre la espalda diciendo –disfruta, no te muevas− y la mantuvo sobre el escritorio, −me sientes− ...
    ... le pregunto y empezó a moverse dentro de ella.
    
    Él no pensaba desaprovechar la oportunidad, levantó sus manos, ella trató de levantarse y él la tomó por los pechos, pero no sabía si trataba de detenerla o de disfrutar sus senos, se movían al mismo ritmo, él pensaba, en no correrse, pero ella preguntó –que por qué no lo hacía− ella quería acabar.
    
    Él dijo –No quiero terminar− pero ella tenía otros planes, con una voz que ella nunca había usado le dijo –necesito darme la vuelta y ver tu cara− él obedeció la soltó y se salió, pero la giró tan rápido para volver a meterla que la sorprendió y ella se quejó, pero más de placer que por molestia.
    
    El seguía dentro de ella, lo vio a los ojos y supo que la quería, el instinto la hizo subir las piernas para ponerlas sobre los hombros, esa visión era mucho para él, la tomó de las caderas y se la acercó aún más, continuó con ese ir y venir que tanto disfrutaba, ella no quería hablar, ese balanceo se hizo tan rápido que él no se pudo controlar y explotó, siguió balanceándose y ella disfrutando.
    
    Bajo lentamente las piernas, la ayudó a incorporarse y mirándose a los ojos se besaron muy suave mientras se abrazaban, ella supo que podía romper su promesa y él que ya no necesitaba ocultar sus sentimientos.
    
    Espero que os haya gustado mi relato. Os recuerdo que las valoraciones y comentarios son gratis y animan mucho. Gracias. 
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