1. Buscando una polla negra para mi esposa


    Fecha: 01/11/2021, Categorías: Sexo Interracial Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos

    ... pantalones, Frank, y diviértete masturbándote."
    
    No sabía qué hacer, así que hice lo que me pidió... Mi pene palpitaba en mi mano… Él se follaría a mi esposa ante mis ojos mientras yo debería conformarme con masturbarme, mirando a ambos.
    
    -
    
    "Sí… Jódeme así!... ¡Quiero esa gran polla negra en mi coño!... ¡Hazlo fuerte!", le pedía Bet.
    
    Él le dio a ella lo que quería… Kelvin me decía siempre que le encantaba escuchar sus gemidos… Y se estrelló contra ella con poderosos golpes de polla, mientras ella gemía cada vez más fuerte.
    
    - "Oh, Dios mío, jódeme fuerte que me voy a cooorreeer"… Observé su gran orgasmo con asombro... Kelvin siguió adelante y continuó follándola... Agarró su pelo rubio y tiró de su cabeza hacia atrás, mientras se la clavaba dentro y fuera y le golpeaba el culo con la mano izquierda.
    
    Me quedé impactado... Esto fue más de lo que esperaba... No estaba seguro de que esto era lo que yo quería.
    
    -
    
    “¿Te gusta esto, puta?”, le preguntó Kelvin.
    
    -
    
    "Ooooh… Siiiii... Es muy bueno… No te detengas."
    
    -
    
    "Me gustan las mujeres calientes como tú... ¡Las putas blancas sois las mejores para follarlas.”
    
    Otra corrida barrió el cuerpo de Bet... Ya llevaba dos… Ella gimió de placer... Esta vez Kelvin sacó su pene brillante y se volvió hacia mí.
    
    -
    
    "¿Tienes algún lubricante, Frank?
    
    -
    
    "¿Qué?"
    
    -
    
    "Un buen lubricante… Es para ponerlo en el ano de tu esposa."
    
    Bet nunca había aceptado el sexo anal... Estaba seguro de ...
    ... que ella no querría esto... Dudé un momento mientras miraba su largo y grueso pene colocado delante de su culo… Sentí una oleada de deseo en mis entrañas, pero fui a buscar el lubricante.
    
    -
    
    "Lubrícala tú, Frank", me dijo, señalando su orificio anal.
    
    Apreté el tubo y coloqué el lubricante alrededor del ano de mi esposa.
    
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    "Bien… Ahora pon también un poco en mi polla."
    
    Sorprendido, hice lo que me pidió, extendiendo una gran cantidad sobre la gruesa cabeza de su pollón.
    
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    "Ya, Frank... Ahora, inserta lentamente mi polla dentro de su ano.”
    
    No podía creer lo que me estaba pidiendo... Y Bet estaba esperando pacientemente, sin ofrecer ninguna objeción... Hice un gran esfuerzo para hacer lo que me pidió… No entraría... Era demasiado grueso.
    
    -
    
    "Métele un dedo, primero... Eso la preparará."
    
    Con el lubricante, mi dedo entró con bastante facilidad... Cuando le coloqué la punta de su polla, sentí que la mía palpitaba excitada... Siempre quise follarla por el culo y nunca me dejo... Ahora le ponía yo la polla de un hombre negro en la entrada de su ano e iba a ver cómo la enculaba.
    
    Con el orificio bien lubricado, tomé su pollón en mi mano y lo introduje lentamente en su ano... Una vez que estuvo metido unos centímetros me dijo que me apartase y comenzó a metérsela y sacársela lentamente pero cada vez, un poco más profundo... Con su otra mano masturbaba el clítoris de Bet y la ponía caliente a tope.
    
    - "¿Te gusta, cariño?", le preguntaba ...
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