1. La noche con Roberto


    Fecha: 22/05/2018, Categorías: Dominación / BDSM Autor: Marlencarvajal, Fuente: CuentoRelatos

    Mi nombre actualmente es Marlen y tengo 18 años. Comenzaré este relato describiéndome un poco, a los 13 años comenzó mi tratamiento hormonal, gracias a eso, hoy tengo buenos atributos, unas piernas muy bien formadas, al igual que unas nalgas muy buenas, soy de esas chicas de cuerpo de pera, caderas anchas y cintura delgada, tengo el cabello negro y lacio, a la altura de los codos, tez morena clara, ojos color café y unos labios un poco carnosos y mido 1,65.
    
    Esto pasó hace una semana atrás. Actualmente vivo con una tía la cual me ha apoyado en todo mi proceso, ella es sola así que somos muy buenas amigas y confidentes. Ella trabaja en una farmacia de 7 a 5 de la tarde, yo entró a mi escuela a las 6 de la mañana y salgo a las 12, siempre al salir de la escuela me va a recoger un vecino, tiene 35 años, es algo atlético, tez clara y mide cómo 10 cm más que yo. Se llama Roberto, siempre me propone tener relaciones, a lo cual siempre contestó que lo pensare, pero ese viernes fue diferente.
    
    Al salir de la escuela, subí a su camioneta, y me dijo que ya no aguantaba, que de verdad necesitaba estar conmigo, que la frustración de tenerme en una cama, lo mataba por las noches, me propuso con mucho más fervor, diciéndome que sería un momento muy lindo, que sería en el mejor lugar, que me gustaría mucho, que se esmeraría para poder satisfacerme, y que ya no aceptaría un “lo pensaré” como respuesta, quería que le diera un no, o un sí. La verdad yo también estaba queriendo, no es ...
    ... nada feo, así que así lo acepte, le dije que si le daría una oportunidad de estar conmigo, pero que era difícil de complacer, el sólo se río y me dio una tarjeta, era un restaurante, ya lo había planeado todo, o sea estaba decidido a que yo aceptara.
    
    Al ir camino a casa le pedí que pasáramos a un lugar, era una tienda de lencería, pero lo hice que se estacionara una cuadra antes y que se quedara en el auto para que no sospechara la sorpresa, así que baje del auto yo sola, y camine hasta la lencería. Hacía tiempo que quería un conjunto en específico, y era la oportunidad de comprarlo, un liguero negro con encaje en el brassier y un cachetero igual de encaje, lo pague y salí, pase por una tienda dónde vi un vestido hermoso que le quedaría perfecto a la lencería, era un vestido negro entallado, hasta 5 dedos abajo de la rodilla, con un cierre que llega desde la espalda hasta dónde termina el vestido, lo compre y regrese al auto, llegamos a casa a las 2:15, la cita en el restaurante era a las 6, aún tenía tiempo, me dejó en casa y se despidió dándome un beso y diciéndome gracias “ponte más hermosa” respondí al beso y le dije hasta luego.
    
    Con tiempo anticipado me duché muy bien, y lave mi bien mi zona íntima, (para el sexo anal) me puse cremas suavizantes con olor a durazno, y comencé a colocarme la lencería, cuando estaba por ponerme el vestido escuche que llego mi tía, abrió la puerta y subió a mi habitación como siempre...
    
    Tía: ¿a dónde va con esa ropa, señorita?
    
    Yo: ...
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