1. La madre de mi amiga Martina


    Fecha: 05/05/2018, Categorías: Dominación / BDSM Autor: zorro_en_celo, Fuente: CuentoRelatos

    ... pidiéndome con urgencia que la insultara sexualmente más y más porque le hacía sentirse más hembra caliente y sucia y era lo que secretamente anhelaba. Yo me fui acercando a su cuerpo y a comerle el coño que tan bien rasurado lo tenía y ella me violaba visualmente.
    
    Mientras yo le devoraba el coño, Sandra gemía y ululaba de pasión libidinosa cual ramera depravada. Mientras la trabajaba su coño con deleite y pasión, me exigió inicialmente que no me despojara de mi obsceno tanga tan libidinosamente sexy, ya que así ella pensaba que se estaba tirando a un actor porno o a un prostituto para hembras solitarias.
    
    Eso me puso más libidinosamente cachondo y salido y nos dispusimos a hacer un 69 muy desenfrenado y lujurioso y mientras ella lamía y relamía mi sicalíptico tanga eso me empujó a taladrar y horadar su ya caliente y borboteante coño con mi lengua. Sandra no paraba de gemir y jadear cual zorra en celo y miraba con lujuria a mi culo y decidió lamerlo por puto morbo. Me puse más cachondo y salido y frené de comerla su bullente coñargón que tanto me encantaba pues lo tenía muy perfumado, para aullar, bufar, berrear y sollozar de placer como un berraco.
    
    La muy zorra de Sandra, estaba embelesada lamiendo mi ojete y yo complacido y seducido ante esta lasciva caricia y me tenía muerto de placer al hacerme esto. Mi boca parecía una brutal máquina de jadear, resollar y resoplar y ella no paraba de darme placer con su lasciva boca de zorra depravada. Permanecía lamiendo mi ...
    ... ojete y Sandra estaba muy cautivada depravadamente al escuchar mis mil jadeos que la ponían más cachonda y eso le hacía sentirse más cachonda y zorra y eso contribuía a que por puro morbo se me pusiera más y más duro el rabo. Después de lamer y llenar de sus babas mi ojete, le dio por querer meterme un dedo en él, idea que me embriagó libertinamente y yo retornaba a jadear y gemir al comprobar cómo iba taladrando con su dedo en todo mi puto ojete que ya estaba tan agitado.
    
    Después de estar en esta procaz postura, me puse frente a ella y le dí con todo lo gordo en su ya bullente coñargón de madura lasciva y la muy puta de Sandra, volvía a sacar a relucir su sucia lengua de guarra libidinosa que tanto me encantaba y me impelía a darle mil rabazos en su agitado coño de loba libidinosa. Me gritaba que siguiera llevando puesto el tanga porque al verlo reflejado frente al espejo de la cama le parecía estar siendo follada por un chulo de putas y eso le ponía más y más salida.
    
    Mientras le tocaba y sobaba sus tetazas de putón desorejado, me insultaba más y más y gemía y chillaba que parecía que la estaba matando. Su necesidad de rabo, su brutal carencia de un hombre que la follara casi a diario, hacía que este polvo fuera de película pornográfica pues ansiaba mi enhiesta pero dura verga con brutal frenesí y mucha urgencia lúbrica. La di más rabo en posición de cuchara y me agarraba los cojones, cosa que me encendía placenteramente y yo no paraba de taladrar su coño.
    
    Nos pusimos ...