Patas arriba (XV) - Relatos Eróticos

Patas arriba (XV)

... a pasar las vacaciones en casa de Iván, así que normalmente conocía gente de aquí o del otro lado del charco, sin embargo yo subía fotos mías, conocí gente muy interesante, conocí canallas, para muchos yo sólo era un chico con un culito bonito que follar, podría hacer una lista pero no es el caso, casi todos, como si estuvieran de acuerdo, después de un “hola” me pedían fotos desnudo, debo admitir que a muchos los complací con semi desnudos sólo por no quedarme solo, pero eso sólo hace que al final consideres que no vales para nada y que cuando alguien te preste un poco de atención, sea en las redes o en la vida real termines por perder la poca autoestima y dignidad que te queda y llegues a humillarte y comer mierda sólo por no estar solo, sólo por una amistad que no te llevará a ningún sitio, quien de verdad quiere ser tu amigo no se interesa por verte desnudo, no te pedirá nada, sólo que seas tú mismo, que seas sincero y no intentes agradar a todos porque al final no agradas a nadie, ni siquiera ti mismo.

La verdad, lo que dice Ylian es muy cierto, no puedo ni debo venderme por un poco de cariño, es más, ni siquiera por un poco de amor, la persona a la que yo le dé lo mejor de mí será esa que me ame como soy, que acepte mis locuras y no pretenda cambiarlas, esa persona que esté dispuesta a compartir conmigo lo mejor de sí mismo y que no exija nada a cambio.

- No volveremos a tocar el tema, a menos que tú quieras hablar de esto, Edu, -me dijo Cami-, pero respecto a lo que sucedió hoy, tengo un tío que es psicólogo y que te podría ayudar, toma, esta es su tarjeta...

Continuará...

“¿Qué podemos agregar... que no se haya dicho ya... o que sí se haya dicho?” (Les Luthiers)

Poco más qué decir... salvo que espero vuestros comentarios, valoraciones y correos, que siempre me ayudan a seguir, aunque debo reconocer que esta vez no me habéis dado casi ninguna idea...