1. La fuerza del deseo. (Madre copular con su hijo)


    Fecha: 18/07/2021, Categorías: Incesto Tus Relatos Autor: Katu, Fuente: Relatos-Eroticos-Club-X

    ... deseaba controlarlo, no podía. El estaba ahora dando rienda suelta a todos los años de restricciones. Arturo me siguió penetrando suavemente con su dedo mientras mi cuerpo seguía en un temblor incontrolable. Por más que trataba de quedarme cayada, no lo lograba y una serie de gemidos arrítmicos salían de mí. Finalmente fue pasando, pero no sabía lo que me esperaba, era por mucho peor ( o mejor…) luego de que Arturo duplicara el tamaño de mis tetas a punta de mamadas, me quitó la bata, dejándome completamente desnuda. El me miraba atónito. Nunca me había visto así… ni de cerca. Pero siempre me cuidé y la verdad es que aun tenía mis curvas bien formadas.
    Lo acosté y me puse de rodilla a su lado. Así le empecé a quitar su boxer y dejé salir ese riel, que me haría gozar como nunca. Habiéndole quedado su boxer me quedé de rodillas en la cama viéndole su pene. Lo empecé a acariciar … en verdad que es estupendo pensé. Yo jamás había metido un pene en mi boca, pero cuando lo vi quise saber que se sentía, pues alguna vez habría oído de esa proeza sexual. Así que sin saber bien que hacer, me quedé viendo al monstruo, lo agarré con una mano y empecé a darle unos besitos en la punta. Volví a ver a Arturo en busca de su aprobación y me dijo… hazlo mamá. No había terminado de decirlo cuando estaba con todo ese pedazo de carne en mi boca. Hice todo lo que pude para complacerlo aunque no sabía si lo hacía bien. Luego el me dijo.. ven acá mamá… me acosté y él se incorporó, poniéndose ...
    ... suavemente sobre mí. Yo abrí mis piernas dejando la cueva de donde él había salido a su entera disposición. Estaba ya entregada a él. Podía hacer conmigo lo que quisiera. Así que acomodó su pene en la entrada de mi vagina y empezó a entrar en su cuevita. Empezó a decirme cosas muy lindas… que me amaba, que siempre estaría ahí para mí, que era muy hermosa, y muchas cosas dulces. Fue todo un caballero. Me vulva se humedeció y fácilmente el pudo ingresar. La sentía dentro mio, sentía como se dilataba mi pequeña cuevita para hacer espacio para su joven y fuerte miembro. Suavemente empezó el mete saca. Yo lo envolví con mis piernas a la altura de su cintura, y ese fue el último momento gentil que sentí. Ahí se convirtió en una bestia. Empujaba con mucha fuerza sobre mí. Y sus embestidas se volvieron cada vez más violentas. No sabía como hacía… cuando creía que ya no me la podía meter más adentro, al momento la sentía ardiendo un poco más. Luego empecé en un estado muy raro, me sentía como fuera de mí. Mi cuerpo empezó a inundarse de un  fuego terrible, mi cuerpo empezó a convulsionar, sudaba como una yegua, mientras él seguía haciendo gala de su portento. No pude más, y tuve un orgasmo que me hizo sentir que el tiempo se detenía. Una energía en mi pecho y mi vagina explotando de sensaciones extrañas para mi. El seguía bombeándome, pero ya mi cuerpo no daba más. Estaba como una muñeca de trapo. No podía moverme. Solo sentía el latido de mi corazón y mi vulva vibrando en sintonía. El, al ...
«1...3456»