1. TERMINARON LAS VACACIONES 2


    Fecha: 01/07/2021, Categorías: Hetero Tus Relatos Autor: Caramelo, Fuente: Relatos-Eroticos-Club-X

    ... pero tus pezones me encantan, son riquísimos!
    -¡Jajaja! ¡A mí me gusta mucho que me los chupés! – Romi cabalgaba suavemente, para que los pezones no se escapen de mi boca. - ¡Pero bien que te gusta el juguito de concha! ¿No?
    -¡Muchísimo!
    -¡Jajaja! – Romi gozaba tanto como yo.
    Patri, entre mis piernas, besaba el culo de Romi y mis huevos. Nos divertíamos a lo grande. Cuando sintió su orgasmo, Romi se tiró sobre mí. Pegó sus tetas contra mi pecho y me tomó del cuello con fuerza. ¡Hermoso sentir su vibración orgásmica en mi latiente pija! 
    -Esperá, me doy vuelta.  – Cuando terminó de temblar, sin sacarse la pija de la concha, Romi giró y quedó frente a Patri. Ver en primer plano su hermoso culo, y como entraba y salía la poronga de su concha, es una belleza total. Patri chupó los fluidos que chorreaban por mis pendejos y la ingle, luego los pezones y el clítoris de Romi, alternando sus labios y su lengua, con mis testículos. 
    -¡Hey Dani, no vayas a acabar! ¡Quiero que lo hagás en mi boca! 
    -¡Cómo te guste! – No me iba a oponer a los deseos de la hermosa Patricia.
    -¡Y vos no te tragués todo! Me tenés que dejar algo para mí. - Romi hacia oír su interés.
    	¡Todo tan cálido y tan húmedo! ¡Tan hermoso!
    -¡Ya va! ¡Estoy a punto! – Romi saltó rápidamente. La pija fue engullida por Patri. La sacudida fue justo en el interior de su boca. ¡Chorros de semen! Sus labios apretaban para que no escapara nada. Con los labios apretados, su boca buscó la de Romi. Pegaron labios contra ...
    ... labios. Apenas un hilillo de semen corrió por las comisuras de las maravillosas mujeres.
    	Yo sabía que hacer ahora. No estaba en condiciones de penetrar a Patri, pero si podría chuparla hasta que acabara todo lo que quisiera, todo el tiempo que quisiera…, para hacerla gozar, no sé si tanto como a Romi, pero para algo serviría, para que no se sienta a menos… 
    	Cuando terminaron de tragar, y los besos mutuos limpiaron los últimos restos de las bocas, abracé a Patri, y la recosté. Sin decir nada, me instalé entre sus piernas. Me agaché. Ella lo sabía. Abrió las piernas, recogiéndolas sobre sí. Entrelazó sus brazos con sus piernas y se tomó los pies. Quedó muy bien expuesta su concha y su ingle. Antes de llegar ahí, besé su entorno. Poco a poco me acerqué a su vagina besando y lamiendo. Pequeños gemidos salían de su boca, a fin de no despertar a Matilda, la beba. Romi se agachó sobre ella y volvió a los besos. 
    No quería que deseara demasiado. Patri se merece lo mejor. ¡Tan rica, tan sabrosa, tan húmeda! ¡Tan hermoso perfume tienen “las tías”! Fui con la lengua a su interior, lo más profundo posible. Luego al clítoris. Acaricié, besé, rosé, apreté… y tiré fuerte, sin soltar. ¡Ahora sí! Patri gimió y se sacudió. Se apoyó con las manos intentando alzar las caderas. Con mis manos ayudé desde sus glúteos. Fue muy lindo sentir sus jugos en mi boca. Cuando se relajó, limpié todo los fluidos lo más profundamente que pude, incluso entre sus pendejos, enredando mi lengua en ellos.
    Repté ...