En la bodega del la señora Ching 2 - Relatos Eróticos

En la bodega del la señora Ching 2

Así acabó el juego que habíamos empezado con la señora Ching de estarle sobandole mi verga en su culo durante varios días y le metí mi verga en su caliente chucha y se lo llené de abundante esperma yo seguía dándole embestidas en su culo hasta que fui perdiendo la erección y cayó ella gimiendo de placer en los costales de azúcar, cuando ya se recuperó ella me vio y reclamó .

-! Noo.. debió pasal esto Jesús, yo tenel ya mucho mielo, polque si mi malido se entela nos mata a los dos.. ¡

-! No se preocupe señora Ching yo no diré nada y esto será nuestro secreto, y disculpe pero ya no me pude aguantar más al tenerla tan cerca  todos estos días frotando su rico trasero y muchas gracias lo disfrute mucho.. ¡

Nos pusimos ya nuestras rosas y continuamos con el inventario y terminamos y recién fuimos para almorzar, ella se mostraba callada conmigo, ahí quise conocerla más y le pregunté cómo se pudo casar con un hombre varios años mayor  que ella y si él hijo del señor Ching era suyo, no quiso decirme nada al comienzo, pero le insistí y me empezó a contar .

-! El señol Ching ela amigo de mi padle y cuando él se quedó viudo polqué su mujel se mulió dando a luz a su hijo fue a velo y le pidió a cambio del dinelo que él le debía que yo fuela su nueva esposa y él aceptó, y así me convelti a los 16 en su mujel y lo hice pol salval a mi familia.. ¡

Era muy triste su historia de vida y cuando me lo contaba revivió ella el momento nuevamente de como su padre la entregó al ...

... señor Ching y se le escapó unas lágrimas, me levanté y fui hacia ella la tuve que abrazarla para consolarla, al estar yo de pie y ella sentada su cara lo tenía a la altura de mi abdomen y mi verga de nuevo la tenía dura y le di un beso en su cabellos. 

La señora Ching me empezó a frotar la erección que tenía y su mano bajó el cierre del pantalón y liberó mi verga y le pasaba por el glande la lengua y me extrañó la mucha experiencia que tenía con una verga en su boca. 

-! Ohh.. mm qué ricoo.. señora Ching no esperaba.. mm.. que lo hiciera tan bien. ¡

-! Glup.. ahola no me digas así mi nombre es XIANG.. glup.. mm.. ¡

Parecía que odiaba que le dijeran señora Ching, y era comprensible  imagino lo fuerte que debió ser para ella que él la tocará y la haga suya cada noche. Y dejé que me siguiera chupándome la verga y me límite a disfrutarlo, su saliva húmeda mojó todo mi pene era increíble cuando se lo metió todo en su garganta unos segundos y luego lo sacó de su boca para ya tomar un poco de aire para luego volverlo a introducirlo todo otra vez de manera rápida y violenta. 

-! Glup.. mm. glup.. mm.. ¡

Ella estaba acostumbrada a ser tratada así bruscamente por su marido así que decidí cogerla de sus cabellos se los jale y Xiang soltó mi verga levanto la mirada y  viéndome río un poco para luego seguir chupándome con muchas ganas la verga y los ruidos que hacía su cabeza al chocar contra su garganta no hacían más que conseguir calentarme más, era tanta la fuerza de la ...