Mis deseos prohibidos. 2 jovencito - Relatos Eróticos

Mis deseos prohibidos. 2 jovencito

... suficiente para dejar a mi merced su entrepierna, le tomé las caderas y empuje mi cabeza como queriendo hundirme en su pubis, tenía el firmé propósito de tragarme todo y así lo hice, logré que su pene y sus bolas entraran en mi boca la cual abrí hasta donde más pude,  tenía toda su joven hombría en mi boca, y sentí su lubricante comenzar a escurrir en mi boca, yo lo estaba haciendo hombre ¡! Lo paré y tomé sus suaves nalgas con ambas manos y empuje su cadera contra mi cabeza, deje sus bolas salir y las volvía a meter por ratos, en un momento me Di cuenta que había estado aguantando mucho el peque para todo lo que le hacía, lo masturbaba, pasaba su verga por mis pezones dejando su humedad en ellos y sobándome mis pechos, tomé un respiro. Le pregunté si ya sentía que iba a sacar semen, venirse, y me dijo que ya mero. Lo calmé un poco. Lo acosté en medio de la cama y le baile un poco, calmé un poco su erección con la técnica de los dedos, seguía duro,  no quería que se viniera aún. Lo masturbé un poquito de nuevo - Avísame si sientes que te vas s venir. - si te aviso. Ahora mi duda ¿debería darle primero vagina o año? Mi ano apretaría más y sería más estimulante, pero a lo mejor se venía y yo quería desvirgarlo por completo, por otro lado siempre es mejor empezar por la vagina y su verga era de buen tamaño, decidí rápido, por la vagina, sin condón, era Virgen después de todo u quería darle su primera vez con total placer. Puse mis rodillas a cada lado suyo, lo miré -tranquilo, ...

... trata de disfrutar, quiero tu semen, pero aguanta y Avísame ¿Si? - Si. Contesto nervioso de excitación. Te su verga, lubricaba mucho y eso me sorprendía y me excitaba, me metí el dedo medio en la vagina y puse de mis jugos en su pene, de nuevo fui por más jugos a mi vagina y los puse en mis pezoncitos y los probé -¿quieres probar? No esperé respuesta, repetí la misma acción y le di a probar mi dedo. ¡uff! Que erótico ver sus labios húmedos por mis jugos. Entonces pensé que no le había dado a probar mi empapada panocha. ¿te gustaría comerme la panochita? - Si, si quiero pero dime como. Ahora mis rodillas estaban a lado de su cabeza, le puse una almohada debajo. Aquí pensé: yo siempre tan sumisa, tan a la merced de los hombres o del perro, usada, una puta obediente, y ahora aquí, enseñando, me encantaba, este aquí debajo de mi era mi juguete sexual, lo estaba desvirgando, lo estaba usando, me estaba sumerhiendo de nuevo en la lujuria de mi morbo ¡me encantaba! Estaba loca ¡!
Antes de que sus labios tocaran los de mi vulva mis jugos escurrieron a su boca, para mi sorpresa el abrio la misma y recibió con su lengua mis juguitos, eso sólo me prendió más. De nuevo le dije: chupa mi clítoris, este de aqui, así, así, duro, succiona, fuerte, fuerte, suave, muerde aquí, mis labios, suave, chupa, estira, lame aquí, en medio, pasa tu lengua, succión, lameme así, ahora así, en círculos, mete tu lengua lo más que puedas acá, mi vagina,¡ahhh! Delicioso¡! Aprendes bien, sigue, sigue, chupa, ...