1. ALFA


    Fecha: 18/11/2017, Categorías: Gays Autor: Anónimo, Fuente: SexoSinTabues

    Es un tío de lo más normal, de esos que llaman poco la atención, calculo que debe de andar por los 60, bajito, calvete, con algo de barriga, bastante peludo, en fin la antítesis de lo que podríamos llamar un tío bueno. Yo soy bastante más grande que él, algo más joven y ciertamente más agraciado físicamente, así todo, él es el Macho Alfa y yo solo una de sus hembras. Este hombre aparentemente insignificante tiene, sin embargo, una personalidad fuerte, sabe muy bien lo que quiere y como tomarlo, para ello sabe ser duro si es necesario pero habitualmente es más bien cariñoso, aunque firme. No gusta de andar con rodeos ni con royos raros de amo-esclavo, control mental ni chorradas por el estilo, su dominación es física, le gusta infringir castigo físico, sin ser violento ni abusivo, no humilla, somete y siempre acabas haciendo lo que él quiere con gusto y sin rechistar. Además de estas aptitudes para el dominio, guarda entre sus piernas un regalo de 18 cm. de largo por 15 de grosor, tiene también unos cojones muy gordos que producen cantidades de leche poco habituales para un hombre de su edad. Le gusta marcar el territorio, orinando en la boca y el cuerpo de sus hembras, esta hembra es solo mía, dice. Te monta y te insemina y para ello se toma su tiempo. Nos conocimos a través de internet, quedamos y la primera vez para mí, fue muy agradable descubrir sus atributos y lo bien que sabía usarlos, mame de su polla, me folló con condón y al final se corrió en mi boca. Después me ...
    ... dijo que le había gustado mucho que me tragara toda su leche (que era mucha) y también me dijo que le gustaría tener relaciones esporádicas y discretas conmigo pero no así, sino de una forma diferente, y yo le dije que sí, que lo que él quisiera. Desde entonces solemos quedar cada dos meses o así, él viaja a menudo a Bilbao creo que por motivos de trabajo y cuando quedamos reservo un buen hotel, distinto del que él se aloja (que pagamos a medias) y pasamos la noche juntos pero dormimos poco, al menos yo. En nuestro segundo encuentro pusimos las condiciones, pocas la verdad, básicamente mucha limpieza, castigo físico sin marcas y sometimiento al Amo pero todo consensuado. Establecimos el protocolo que él dijo que le gustaba y a mí me pareció bien. Días antes de la cita ando nervioso, excitado, mi polla babea todo el tiempo y no puedo masturbarme por orden de mi Amo, me siento como yegua en celo, como una hembra que quiere ser preñada. Por orden de mi Amo antes de la cita debo tomar solo líquidos y vaciarme bien con dos o tres lavativas de agua templada, también le gusta que vaya completamente rasurado por ahí abajo. Yo siempre llego primero al hotel y espero a mi Amo desnudo sobre la cama a cuatro patas con el ojete expuesto y los huevos colgando. Sé que llegará sobre las diez de la noche, y estoy cada vez más ansioso, cuando siento que la puerta se abre tiemblo de gusto y excitación. No hablamos, se desnuda lentamente y después me acaricia la espalda, las nalgas, los huevos, ...
«1234»