MI PRIMERA VISITA AL CINE PORNO EN OAXACA - Relatos Eróticos

MI PRIMERA VISITA AL CINE PORNO EN OAXACA

... mientras él se ponía el condón, yo aproveché para untarme un poco de lubricante en el culo (también tenía condón, pero es bueno que los otros también pongan algo antes del sexo, ¿no creen?).

Ya en posición, el tipo puso la cabeza de su verga en la entrada de mi hoyito. Lo había trabajado a conciencia y él lo sabía, así que una vez en la entrada, en un solo movimiento, lentamente me la metió hasta el fondo. Una vez con toda la verga dentro, me preguntó: “¿te dolió, mi amor?”, “No… todo bien…” “Bien mi amor, prepárate a disfrutar una buena culeada”. Dicho y eso, comenzó a culearme a conciencia. Dios, qué rica verga la del tipo este. Comenzó a bombearme con ganas y yo ya estaba recaliente y comencé a mover el culo con toda mi experiencia, ya se habían puesto unas 5, 6 personas cerca mirando el espectáculo. Menos mal que tenía la cara frente a la pared, así me evitaría que alguien me ponga el pene al frente para que se la chupe o comience a sobarme las tetillas, sobre todos porque tenía la camisa abierta y el tipo, mientras me culeaba, jugaba con ellas, me los estrujaba de manera delicada pero muy efectiva, como dije, es mi zona más sensible y el tipo sabía sacarles provecho a mis debilidades.

Me estuvo dando por un buen rato hasta que se corrió hundiendo todo su pene en mi culo y pegando su cuerpo a mi espalda. Estuvimos así un buen rato mientras me comía la oreja y me decía lo delicioso que había estado mi culo. Me sacó la verga, se subió el pantalón, me dio un súper ...

... beso, me palmeó el culo y se fue por donde había venido, ya me había subido el pantalón, pero todavía faltaba abrocharme la camisa. Lo hice rápidamente y me fui al baño a arreglarme un poco. Luego de arreglarme, salí del baño, me compré una botella de agua en el puesto del cine y entré un ratillo más a la sala. Me paré en uno de los laterales de la sala viendo el movimiento del cine. Estaba entretenido entre mirar la película, sondear los asientos, algunos parados en las columnas igual que yo hace un momento, muchas cabezas moviéndose chupando polla, los acercamientos entre personas grandes que en las calles los ves muy masculinos pero que por ahí los vi muy pasivos. Estaba entretenido con todo eso y mi botella de agua cuando siento que alguien se para a un metro de mí, a mi espalda. Volteo a mirarlo y era un tipo más o menos de mi edad, un poco más bajo que yo, mirándome y sobándose el paquete. La verdad, no sé por qué, pero me hizo gracia la actitud del tío y me saló una sonrisa y volteé de nuevo mirando a la pantalla. En eso, siento una mano que comienza a sobarme el culo y el tipo se pega, con el pene afuera, haciéndome sentir el grosor del pene por sobre el pantalón. “Ya estamos de nuevo”, pensé. La verdad, se notaba un buen pedazo de verga, estiro mi mano hacia atrás y guau, una muy buena verga, muy gruesa y con la cabeza tipo hongo. La verdad, se me antojó probar esa delicia que se me pegaba al culo y me puse en cuclillas a chupar esa delicia. Después de estar un rato ...