1. LA SEÑORA DEL JEFE


    Fecha: 18/06/2021, Categorías: Infidelidad Autor: Anónimo, Fuente: SexoSinTabues

    ... preguntó: - qué le pase a ese semental ¿por qué motivo molestaba a la yegua hasta el punto de morderla? Comprobé que el semental quería montar a la yegua y esta se estaba haciendo de rogar. Natalia se ruborizó ante mi respuesta. Mucho más cuando comprobó que el semental negro blandía un pene enorme, que colgaba majestuoso, totalmente erectó. Ella me indicó:¿ eso no será lo que pienso que es? Le conteste: cierto, es el pene del caballo. Me contestó: Dios mío es enorme, si eso le entra a la yegua la va a matar, mide más de un metro. Le manifesté: -bueno aunque es grande, la vagina de la yegua se adaptaba perfectamente a dicho cipote, y lo aguantara sin problemas. En ese momento, el caballo se subió sobre las patas traseras de la yegua e intentaba penetrar aquella con su majestuoso pene, pero no acertaba, ya que ésta no se quedaba quieta. Una y otra vez se subía sobre la misma y realizada la misma operación. El estar con una mujer en el establo de una cuadra de animales, escondidos viendo aquel espectáculo me estaba poniendo enfermo. Sin querer había comenzado a tener una erección. Los colores del rostro de Natalia demostraban que estaba igualmente excitada con el encuentro sexual de aquellos animales. Ella me dijo:- ese semental está que no puede más, si la yegua no se deja la va a matar a mordidas. Le indique que normalmente un hombre ayuda al caballo dirigiendo su pene hacia la vagina de la yegua para que este la pueda penetrar. Pero que según parece el caballo se había ...
    ... soltado y había entrado al lugar donde estaba la yegua, quizás al comprobar que ella está en celo. Y ¿cómo sabe que está en celo?, me llegó a preguntar algo morbosamente. -Pues. por el olor que desprende su vagina. Los caballos tienen un olfato muy especial para ello. Me dijo, sonriendo: -Que pena que los hombres no tengan ese olfato tan definido, al menos sabrían cuando deseamos estar con ellos y cuando no. Yo le manifesté: - bueno ciertos hombres tienen un olfato muy parecido, y saben detectar cuando la mujer es receptiva y cuando no. - Venga Andrés, que pasa, ¿no me estará diciendo que Vd. es uno de esos hombres? Muy vanidoso, le contesté_ -en muy pocas ocasiones he fallado, y que en su gran mayoría he acertado en mi diagnostico. Ella se ruborizó, ya que sabía que en esos momentos estaba en sus días más fértiles, y que se encontraba superexcitada. Mucho más al comprobar el espectáculo que estaban viendo. Por ello ante la sospecha de que yo pudiera estar percatándome de su estado de calentura, su cara se encendió. Como tenía una erección bastante visible en mi pantalón, el cual ella pudo comprobar, poniéndose más nerviosa, me atreví a decirle: -¿quiere que le diga que pienso sobre cuál es su estado actualmente? Ella me dijo: -Andrés no cree que se está pasando. ¿ No creo que esa sea una pregunta para realizar a una señora casada como yo?. -Lo siento Natalia, no quise ofenderla. Pero era Vd. la que hizo anteriormente la pregunta impertinente. No me contestó. En ese momento ...
«1234...13»